GINEBRA.- Los enfrentamientos entre las fuerzas del este de Libia, lideradas por el mariscal Jalifa Haftar y las del gobierno reconocido internacionalmente han dejado al menos 47 muertos, 181 heridos y unos tres mil 400 desplazados, reportó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En conferencia de prensa en Ginebra, el portavoz de la OMS, Tarik Jasarevic, precisó que la mayoría de las víctimas mortales son combatientes, aunque también hay algunos civiles, incluidos dos médicos que arriesgaron sus vidas para evacuar a pacientes heridos de áreas de conflicto.
“Es inaceptable que trabajadores sanitarios sean atacados durante un conflicto armado. Las partes enfrentadas deben respetar el Derecho Internacional Humanitario y garantizar la seguridad de los trabajadores y las instalaciones de salud”, dijo el director de la OMS para el Mediterráneo Oriental, Ahmed al Mandhari.
Desde el inicio de la ofensiva lanzada hace cinco días por las fuerzas de Haftar, al menos tres mil 400 personas se han visto obligadas a huir de sus hogares, según cifras de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), si bien otras agencias dan cuenta de dos mil 800.
El pasado 4 de abril, el mariscal Haftar ordenó al Ejército Nacional Libio (ENL) lanzar una ofensiva para tomar el control de Trípoli, sede del Gobierno de Unidad Nacional (GNA) reconocido por la comunidad internacional, para “liberarla de terroristas”.
En respuesta, el GNA, que encabeza Fayez Sarraj, declaró el estado de alerta y movilizó sus fuerzas, mientras el Ejército de Haftar continúa su avance desde varias direcciones hacia la capital, incluso bombardeó la víspera el aeropuerto de Mitiga, el único operativo de Trípoli, según el diario The Libya Observer.
El ENL reivindicó el ataque contra el aeropuerto de Mitiga, en el este de la capital libia, que motivó la suspensión de todos los vuelos y la evacuación del terminal aéreo, aunque no se registraron víctimas.
En Nueva York, el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, condenó “enérgicamente” la escalada militar en Libia, “incluido el ataque aéreo contra el aeropuerto Mitiga”, además volvió a lpedir una tregua.
En tanto, el enviado de la ONU para Libia, Ghassan Salamé, denunció que el ataque contra el aeropuerto fue “una violación grave del derecho internacional humanitario, que prohíbe ataques contra la infraestructura civil”.
Libia está sumida en una crisis desde que la caída su líder histórico, Muamar Gadafi, en 2011, derivara en una dualidad de poderes, choques entre grupos rivales, la proliferación de facciones yihadistas y mafias que trafican con migrantes irregulares de África a Europa.
gac