Nueva Zelanda tiene nueva ley de control de armas, la cual prohíbe la posesión de fusiles de asalto y armas semiautomáticas tipo militar, medida adoptada tras el doble atentado en Christchurch de marzo pasado, que causó 50 muertos y 39 heridos.

 

Con 119 votos a favor y uno en contra, el Parlamento neozelandés dio luz verde este miércoles al proyecto de ley, el cual debe ser aprobado por el gobernador general antes de entrar en vigor, lo que se espera suceda el viernes próximo, señaló la versión electrónica del nzherald.

 

La posesión de fusiles de asalto y armas semiautomáticas será castigada con hasta cinco años de prisión, con las excepciones para el control de plagas o coleccionistas.

 

De acuerdo con el reporte, las personas que tienen ese tipo de armas deberán entregarlas a la Policía de aquí a septiembre próximo.

 

La primera ministra neozelandesa, Jacinta Ardern, cumplió de esta manera un objetivo, ya que desde el ataque por el australiano Brenton Tarrant el pasado 15 de marzo, pidió un cambio inmediato a la ley de control de armas.

 

DJOR