Luego de que en la madrugada más de 300 migrantes ingresaran de forma violenta al país por la frontera entre México y Guatemala, las oficinas de tramite del Instituto Nacional de Migración (INM) en esta ciudad lucen tranquilas, con más de cien migrantes a la espera de ser atendidos.
Los centroamericanos, provenientes principalmente de Honduras y Nicaragua, sostuvieron que desde temprano se han formado a fin de ser llamados por las autoridades mexicanas para comenzar su preregistro, el cual permitirá al INM conocer el número de personas que solicitan el ingreso.
No obstante, los migrantes esperan que con este registro puedan obtener un permiso o visa humanitaria para poder transitar libremente por el país, en su búsqueda de llegar a Estados Unidos.
De acuerdo con información del INM, hasta el momento no se tiene un número específico sobre los migrantes que han sido registrados al ingresar a México por esta frontera, sin embargo, detalló que estos reciben servicios de atención médica, así como un rato de sombra y descanso bajo las lonas blancas que el instituto colocó para protegerlos de las inclemencias del tiempo.
Con su sombrero de paja tipo vaquero y sus lentes de sol rosa palo, Omar, un migrante hondureño que llegó a Mexico hace unas horas, después de tres días de viaje, espera paciente a las afueras de las oficinas del instituto que las autoridades les tomen sus datos a él, a su esposa y a sus seis hijos.
“Espero que nos atiendan pronto porque hay muchas personas mayores, niños y mujeres con problemas de insolación y lo que le pedimos a la autoridad es que nos colaboren”, apunta.
Tímido, alejándose de la cámara poco a poco, Omar narra que él decidió emprender el duro viaje a México, porque está seguro que este país le podrá ofrecer las oportunidades de una mejor vida de la que tenía en Honduras.
A diferencia de la mayoría de los extranjeros centroamericanos que ingresan a México, Omar y su familia quieren residir en el país, porque “este gobierno del presidente López Obrador está ayudando mucho y esperamos que nos facilite este trámite para seguir nuestras intenciones de ingresar a Mexico”.
El hombre, quien era chofer en su país, comenta que ellos tienen que ofrecer a México mano de obra calificada para las diversas industrias que aquí se expanden.
“México es un país que está en desarrollo y yo pienso que nosotros como centroamericanos podemos ofrecer mano de obra calificada que damos en Estados Unidos, porque nosotros allá hacemos el trabajo duro que también podemos hacer en México”, detalla Omar.
Divertido, comenta que le gustaría desempeñarse en el sector de la tecnología en la Ciudad de México, pues en Honduras tiene un negocio de arreglo de teléfonos celulares e instalación de programas de computadora.
jhs