Foto: Reuters Un hombre armado entró este sábado en una sinagoga repleta de fieles en el área de San Diego y abrió fuego con un rifle de asalto, matando a una mujer e hiriendo a otras tres personas  

POWAY.- Un hombre armado entró este sábado en una sinagoga repleta de fieles en el área de San Diego y abrió fuego con un rifle de asalto, matando a una mujer e hiriendo a otras tres personas en el último día de la Pascua judía, dijeron autoridades.

 

El sospechoso, identificado por la policía como John Earnest, un vecino de San Diego de 19 años, huyó del lugar en auto y fue arrestado poco tiempo después cuando se detuvo y se entregó a la policía, dijeron las autoridades.

 

El alguacil del condado de San Diego, Bill Gore, dijo que estaban estudiando un “manifiesto” que el hombre armado aparentemente publicó en redes sociales junto con otras “pruebas digitales”. Gore agregó que la policía y el FBI investigaban la “posible participación” de Earnest en un incendio provocado en una mezquita cercana hace cerca de un mes.

 

Los investigadores hallaron un largo texto violento y antisemita escrito por un individuo que se hacía llamar John Earnest, en los sitios de almacenamiento en línea Pastebin.com y Mediafire.com. Los enlaces al contenido de ambas fuentes se publicaron en el foro de mensajes de Internet 8chan.

 

En ese texto, el autor reclamó el crédito por incendiar una mezquita en Escondido, una ciudad a unas 15 millas (24 km) al norte de la sinagoga atacada el sábado.

 

El ataque en la sinagoga de la Congregación Chabad en Poway, California, a unos 23 kilómetros al norte del centro de San Diego, sucede seis meses después de la muerte de 11 fieles y otras seis personas a manos de un hombre armado que irrumpió en la sinagoga Árbol de la Vida en Pittsburgh gritando: “Todos los judíos deben morir”. Este atacante fue arrestado.

 

El alcalde de Poway, Steve Vaus, quien habló desde un centro de comando de la policía, calificó el incidente como un “crimen de odio” y afirmó que su evaluación se basó en las declaraciones del pistolero cuando ingresó a la sinagoga.

 

Hablando con los periodistas en la Casa Blanca, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, dijo: “Envío mis más sinceras condolencias a las personas afectadas”. Y agregó que “parece un crimen de odio” y que las autoridades “llegarán al fondo”.

 

Un rabino entre los heridos 

El alguacil Gore dijo a los reporteros que cuatro personas fueron alcanzadas por disparos y llevadas al Centro Médico Palomar, donde murió una de las víctimas, una “mujer mayor”. Los otros tres pacientes, estaban en condición estable, agregó Gore. No fueron reveladas las identidades de las víctimas.

 

Las autoridades identificaron más tarde como una de las víctimas sobrevivientes a un rabino, que resultó herido en sus manos. La oficina del alguacil dijo que los otros dos pacientes, un hombre de 34 años y la chica, fueron alcanzados por metralla pero “estaban bien”.

 

El ataque ocurrió poco antes de las 11.30 am hora local en Poway, suburbio de unos 50.000 residentes, cuando el sospechoso entró en la sinagoga y comenzó a disparar, dijo Gore.

 

Mientras se escapaba, un agente de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos que estaba fuera de servicio abrió fuego contra el sospechoso, golpeando el vehículo pero aparentemente sin darle al hombre, según Gore.

 

El atacante fue arrestado poco tiempo después cuando se entregó pacíficamente a la policía.

 

El canal de televisión local KGTV 10News reportó que la sinagoga estaba tenía una celebración a partir de las 11.00 am que culminaría en una cena de Pesaj a las 7.00 pm. Las autoridades dijeron que unas 100 personas estaban dentro del templo en ese momento.

 

Un residente del área, Christopher Folts, dijo en CNN que escuchó de seis a siete disparos, luego un hombre que gritaba, seguido de seis a siete disparos más.

 

Cantor Caitlin Bromberg, de la sinagoga Ner Tamid, ubicada cerca del lugar del incidente, dijo que su congregación se enteró del tiroteo al final de sus servicios y que se dirigían a Chabad de Poway para mostrar apoyo y ayuda.

 

“Estamos horrorizados y enojados, y queremos que sepan que estamos pensando en ellos”, dijo Bromberg a Los Angeles Times, agregando que ella no ha tenido noticias de los líderes de Chabad porque normalmente no usarían el teléfono durante el Sabbath.

 

 

fahl