Miguel Barbosa Huerta, candidato a la gubernatura de Puebla por la coalición Juntos Haremos Historia, se pronunció por modificar la realidad en la entidad, para que “el poder sea la mejor herramienta para trabajar por los poblanos”.
En gira proselitista en el municipio de Hueytamalco, el candidato indicó que existe una Puebla destrozada y ello lo refleja claramente la realidad que rodea a los municipios, donde el poder público ha jugado un papel determinante para que así sea.
Como gobernador, dijo, se acabará esa vieja cultura de la adoración al poder, pues ello ha provocado desconfianza hacia las autoridades, “incluso por las que votaron, ya que se vuelven arrogantes y engreídas. Yo seré un gobernador que rompa esa distancia entre el ejercicio del poder y la sociedad”.
Barbosa Huerta destacó que al poder hay que respetarlo, pero este a su vez debe cumplir con sus encargos, como es el respeto absoluto a la ley y a sus gobernados, por lo que aseguró que al gobierno llegará un hombre que “sueña, anhela y sufre como cualquier poblano”.
En su visita a este municipio, enclavado en la Sierra Nororiental, el candidato de los partidos Morena, del Trabajo (PT) y Verde Ecológista de México (PVEM), indicó que en su gestión impulsará la justicia como mecanismo para que todos tengan la certeza de contar con igualdad de oportunidades; “no habrá poblanos de segunda, tercera o cuarta”, reiteró.
En este lugar, el abanderado a la gubernatura reiteró su llamado a los alcaldes para trabajar sin fobias políticas o partidistas, ya que es momento de la reconciliación para Puebla.
Ante los serranos, les ofreció la reactivación al campo, devolver la paz y la seguridad, así como garantizar acceso a servicios médicos, educación y mejores servicios.
fahl