La mayoría de las compañías no financieras calificadas en México tienen un riesgo de liquidez que va de bajo a medio, y serán capaces de cubrir su deuda de corto plazo y los vencimientos de su deuda de largo plazo, gastos operativos e inversiones de capital regulares hasta 2020, considera Moody’s Investors Service.
“Alrededor de 85% de las 27 compañías no financieras mexicanas con calificación de B3 y más arriba, el día de hoy presentan un riesgo de liquidez entre medio y bajo”, de acuerdo con el analista de Moody’s, Alonso Sánchez.
“En general, estas compañías pueden cubrir su deuda de corto plazo y los vencimientos de su deuda de largo plazo, así como sus gastos operativos e inversiones de capital regulares hasta 2020, utilizando el efectivo en caja, flujo de efectivo libre, y las líneas de crédito comprometidas que tienen disponibles”.
La calificadora internacional de riesgo crediticio señala que en México todavía es común que las prácticas de liquidez corporativa se encuentren por detrás de las normas globales y algunas compañías mexicanas carecen de políticas expresas para administrar su riesgo de liquidez.
Adicionalmente, varias compañías no cuentan con líneas de crédito comprometidas y dependen de los bancos o del acceso al mercado, lo cual incrementa su riesgo de refinanciamiento.
Moody’s señala que la mayoría de las compañías mexicanas enfrentan cuando menos cierto nivel de riesgo de tipo de cambio, pero en general el riesgo es bajo.
De las compañías analizadas, todas tienen su exposición cambiaria totalmente compensada por sus utilidades generadas en moneda extranjera y otros factores, precisa en un reporte.
jhs