Luego de una reunión entre el rector de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), Adolfo Pontigo Loyola, y el subsecretario de Gobernación, Zoé Robledo, se liberaron tres de las cinco cuentas universitarias para el pago de nómina y servicios.
El 26 de abril pasado, la Unidad de Inteligencia Financiera congeló 234 cuentas de la UAEH, debido a movimientos inusuales como transferencias a bancos suizos, posiblemente relacionados con actos de corrupción.
Para el 29 de abril fueron desbloqueadas 66 cuentas en las que se concentraban los recursos para becas y gastos; sin embargo, la UAEH insistió en que se mantenían bloqueados los recursos para su operación e, incluso, organizaron una marcha y amagaron con suspender diversos servicios a los estudiantes.
Ayer tras el encuentro, el rector reconoció que tres cuentas en las que se concentran recursos para costear el pago de docentes y servicios, fueron desbloqueadas.
Aseguró que presentaron toda la documentación probatoria, donde a su juicio, se comprueba que las transferencias al extranjero fueron legales.
La UIF, dirigida por Santiago Nieto, todavía mantendría una investigación abierta por el presuntos actos de corrupción y el congelamiento de al menos 150 cuentas bancarias, incluidas las personales de las autoridades universitarias.
Extraoficialmente, la indagatoria es por los manejos financieros del Patronato Universitario, cuyo presidente es Gerardo Sosa Castelán, un político, ahora identificado con Morena, que ha mantenido el control de la Universidad por los últimos 30 años.
LEG