El líder opositor venezolano Juan Guaidó ordenó el sábado a su representante diplomático en Estados Unidos a una reunión “de inmediato” con el Comando Sur del Departamento de Defensa de Estados Unidos para coordinar una posible cooperación con la que busca superar la crisis política del país sudamericano.
Guaidó, reconocido como presidente encargado por más de 50 países, incluido Estados Unidos, agregó que recibió una comunicación de la cancillería de China que expresó su voluntad de unirse a un esfuerzo diplomático con los países para una solución a la profunda crisis de Venezuela.
“Hemos instruido a nuestro embajador Carlos Vecchio que se reúna de inmediato (…) con el Comando Sur y el almirante (Craig Faller) para poder establecer relación directa y alcance en materia de cooperación”, dijo Guaidó en una concentración con sus seguidores en Caracas.
Ni el Comando Sur, que supervisa las fuerzas estadounidenses en América Latina, ni Vecchio, respondieron pronto a solicitudes de comentarios.
“En todo momento he hablado de cooperación, la intervención en Venezuela ya existe y es la penetración del ELN (Ejército de Liberación Nacional colombiano) en Venezuela, y es la penetración de los cubanos en Venezuela”, añadió en la actividad en apoyo a los diputados que fueron arrestados, refugiados en embajadas y amenazados recientemente después de la movilización contra Maduro a finales de abril.
Guaidó se proclamó como presidente interino en enero tras invocar la Constitución, argumentando que la reelección de Nicolás Maduro fue ilegítima. Pero el mandatario acusa al líder opositor de estar detrás de un “golpe de Estado” con el que busca sacarlo del poder.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha invertido un importante capital político en la crisis de Venezuela, pero no ha mostrado intención de usar la fuerza militar. Recientemente anunciaron el despliegue de un barco hospital en la región.
Sin embargo, el secretario de Defensa en funciones de Estados Unidos, Patrick Shanahan, destacó la semana pasada que el Pentágono ha estado analizando una amplia gama de opciones militares.
El Ministerio de Comunicación e Información de Venezuela no respondió a una solicitud de comentarios de Reuters.
En una actividad con la Armada el sábado, el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, denunció que una embarcación de la Guardia Costera de Estados Unidos realizó labores de patrullaje en aguas del territorio venezolano, una acción, que agregó “no lo vamos a aceptar”.
“No es una súplica, no es un por favor, le exigimos a las autoridades militares de los Estados Unidos que respete las aguas jurisdiccionales y la soberanía territorial de la República Bolivariana de Venezuela”, dijo el ministro.
Un portavoz del Comando Sur informó el viernes que un barco de la Guardia Costera estaba en una misión de “detección y monitoreo de drogas” en aguas internacionales en el Mar Caribe el 9 de mayo.
La mayoría de los países latinoamericanos, así como la Unión Europea, se ha opuesto a una posible intervención militar en Venezuela.
El Grupo Internacional de Contacto (GIC), conformado por países americanos y europeos, dijo el martes que su prioridad es evitar una escalada de la crisis en Venezuela y que está listo para enviar una misión política a la nación sudamericana para buscar una solución democrática.
jhs