La esquizofrenia del nuevo gobierno ha llegado al Partido del Trabajo (PT).
La administración federal, y en especial por reservas de usted ya sabe quién, está inconforme por la conducción de ese partido de Alberto Anaya en muchos sentidos y en concreto en las votaciones del Congreso de la Unión.
No es aliado de fiar.
El PT ha sido un compañero histórico de la izquierda –antes con el Partido de la Revolución Democrática (PRD), hoy con el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena)- sin ninguna discrepancia.
Pero últimamente ha tenido distanciamientos.
El dato más reciente es haberse alejado de la reforma educativa para abolir el plan de Enrique Peña y generar uno distinta, más afín al posicionamiento del tabasqueño.
Quizá Anaya y compañía sopesaron cómo mantenerse muy cerca de la izquierda radical, a la cual se sujeta para ofrecer a López Obrador una oferta muy atractiva para cualquier elección.
Su apuesta, obvio, era hacerse del ala radical del magisterio y en concreto de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y por eso se unió a sus intereses.
Eso no gustó en las alturas, pero no era la única vez.
Y LE ASIGNAN UNA MILLONADA
Pese a todo, el Partido del Trabajo y en especial su dueño Alberto Anaya está en la mejor circunstancia.
Vea usted.
Ha dejado de ser prenda en campañas electorales y compañero de Morena en varios lados, pero cuenta con una fortuna de dinero.
Dinero, claro, de los mexicanos.
La misma práctica del pasado.
En el sexenio anterior el PT recibió cientos de millones de pesos y hasta el nuevoleonés Jaime Rodríguez El Bronco protestó, lo cual obligó a abrir averiguaciones en contra de Anaya, su esposa y otras personas.
Al final fueron exonerados todos.
Hoy, ya en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, se han reabierto las arcas nacionales y se les tienen predestinados 800 millones de pesos para el presente año y supuestamente para estancias infantiles.
Aquí está lo esquiozofrénico: el gobierno ha ordenaod no dar dinero a organizaciones ciudadanas, civiles o como se les quiera llamar, pero sí al PT.
Y eso que, por órdenes de usted ya sabe quién, no será aliado de Morena.
ALUMINIO PARA AEROPUERTOS
1.- Cuentan en Estados Unidos el gran cálculo del gobierno de Donald Trump.
La eliminación de aranceles tiene un objetivo en puerta: la venta de tres mil millones de toneladas de aluminio para la construcción de los aeropuerto mexicanos y obras complementarias.
No fue gratuito la desgravación a la importación de acero.
2.- Los días recientes han confirmado nuestro adelanto de hace días: muchos cuadros priistas se han sumado a las campaña de los candidatos de Morena.
Los principales beneficiados, como dijimos entonces, serán el poblano Miguel Barbosa y Jaime Bonilla, quienes inclusive se dan la libertad de designar coordinadores seccionales, distritales y municipales a connotados militantes del Partido Revolucionario Institucional.
Mientras tanto, el PRI se resigna para la peor derrota donde fue gobierno hasta hace poco y competidor en para alcaldes, Congresos y gubernaturas.
LEG