El pleno de la Cámara de Diputados avaló por unanimidad con 445 votos en favor y sin cambios, la minuta del Senado de la República de reformas constitucionales a fin de que la mitad de los cargos públicos en los tres órdenes de gobierno sean ocupados por mujeres.
En medio del grito “¡sí se pudo!”, “¡sí se pudo!”, las legisladoras de todas las bancadas festejaron en la máxima tribuna el dictamen de reforma a los artículos 2º, 4º, 35, 41, 52, 53, 56, 94 y 115 de la Constitución en materia de Paridad de Género y que pasa a los Congresos locales para su aprobación.
Esta vez, las pancartas de las fracciones legislativas no fueron de protesta ni de acusaciones entre opositores y Morena con sus aliados, sino de júbilo por una reforma que saldará una deuda histórica con quienes han dado esta lucha.
Como testigos de lo que calificaron como un día histórico estuvieron presentes las organizaciones: Mujeres en Plural y Cincuenta más Uno, entre otras.
Al fundamentar el dictamen , la morenista Miroslava Carrillo calificó este día de histórico, porque se consolida un avance constitucional más, y dijo que México se pondrá a la vanguardia internacional, con paridad de género de manera transversal en la Constitución y sostuvo que está reforma histórica no puede ser autoría de nadie, sino que es de todos.
“Se fortalece los derechos políticos de las mujeres, tanto de su participación en los puestos de representación política, como en el ejercicio público de los poderes ejecutivo y judicial, así como en órdenes de gobierno, organismos autónomos, hasta llegar a los ayuntamientos que son la célula madre del federalismo y del poder político en México”, aseveró.
Explicó que el Artículo 41 se establece la obligatoriedad de la aplicación del principio de paridad de género en puestos específicos dentro del Poder Ejecutivo y sus homólogos en las entidades federativas.
Asimismo, se plantea que dicho principio deberá observarse en la conformación de los organismos autónomos y obliga a los partidos políticos a formular la postulación de sus candidaturas, garantizando dicho principio en los distintos cargos de elección popular.
Además se instituye que el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación estará conformado por 11 integrantes, mujeres y hombres de manera indistinta. Se establece que será facultad del Estado estipular en la legislación aplicable a la materia las formas y procedimientos que deberán de seguirse mediante concursos abiertos que ponderen el principio de paridad de género en la integración de los órganos jurisdiccionales.
La priista María Alonzo Morales destacó que las mujeres representan 50 por ciento de la población mexicana, “y con esta reforma integraremos el 50 por ciento de las estructuras del gobierno”.
En tanto que la panista Verónica María Sobrado dijo que esta reforma contiene el lenguaje incluyente, lo que permite visibilizar, promover y respetar la participación paritaria de las mujeres en la vida pública y política del país.
Afirmó que la reforma es resultado de los consensos de todos los grupos legislativos, acuerdo que derivó de la voluntad política y que dejó de lado los intereses particulares para sumarse hacia una propuesta que es perfectible pero que nos permite coincidir en un avance real y muy significativo para el logro de la igualdad sustantiva.
Por Morena, Wendy Briseño sostuvo que se está dando un nuevo sentido a la política y al ejercicio efectivo del poder desde la toma de decisiones, pues con más mujeres en el espacio público, en organismos autónomos, gabinetes municipales, cabildos, congresos, secretarías de estado, entre otros espacios.
Así, enfatizó, “demostramos a la ciudadanía que puede haber nuevos referentes de buenas prácticas en posiciones de poder público”, a lo que exigió: “basta de decir que no hay mujeres capaces para ocupar los cargos”.
Legisladores de los partidos del Trabajo (PT), Verde Ecologista de México (PVEM), Movimiento Ciudadano y Encuentro Social fijaron su postura en favor de la minuta del Senado.
El documento puntualiza que deberá observarse la paridad en los nombramientos de titulares de las secretarías de despacho del Poder Ejecutivo federal y sus equivalentes en las entidades federativas y en la integración de los organismos públicos autónomos.
Establece que se elegirán representantes indígenas ante los ayuntamientos observando en principio de paridad de género. Y detalla que deberá haber paridad en las candidaturas de los partidos, en la integración de Cámaras de Diputados y Senadores y determina que la Suprema Corte de Justicia de la Nación estará compuesta por 11 integrantes ministras y ministros.
Las disposiciones transitorias establecen un plazo de un año improrrogable, a partir de la entrada en vigor del decreto, para que se realicen las adecuaciones normativas para observar el principio de paridad de género en los términos establecidos en el segundo párrafo del artículo 41 constitucional.
fahl