China instó a Estados Unidos a modificar sus prácticas “erróneas” y proporcionar un ambiente justo para las 10 empresas chinas y tres individuos que han sido afectados por las sanciones impuestas, antes de que se reanuden las negociaciones comerciales.
«La postura de China en las conversaciones ha sido clara: si Estados Unidos quiere reanudar las conversaciones, deben mostrar sinceridad y corregir sus prácticas erróneas», asestó Gao Feng, portavoz del ministerio de Comercio asiático.
“Solo sobre la base de la igualdad y el respeto mutuo pueden continuar las conversaciones», indicó.
China, destacó el funcionario, siempre está firme en contra de la llamada “jurisdicción de brazo largo sobre las empresas chinas” al usar las leyes nacionales de cualquier otro país.
Aunque no especificó a qué signos de sinceridad se refiere, recordó que la administración estadounidense intensificó unilateralmente las tensiones comerciales.
“Han tomado muchas medidas que perjudican gravemente las conversaciones comerciales», dijo Gao en referencia a las 10 empresas chinas y tres individuos que ya han sido afectados por la recientes sanciones estadounidenses, incluido el gigante tecnológico Huawei.
Subrayó que China no hará concesiones en cuestión de principios y que “tomará todas las medidas necesarias para salvaguardar firmemente los intereses legítimos de las empresas chinas”.
Más tarde, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pronosticó un rápido final para la guerra comercial, pese a que no se han programado conversaciones de alto nivel desde que la última ronda de negociaciones terminó en Washington hace dos semanas.
«Está sucediendo, está ocurriendo rápido y creo que las cosas probablemente vayan a pasar rápido con China porque no puedo imaginar que estén encantados con miles de compañías abandonando su país hacia otros lugares», dijo Trump en la Casa Blanca, sin dar evidencias de tal éxodo.
Agregó que se reunirá con su par chino, Xi Jinping, en la reunión del G-20 en junio, en Japón.
Las negociaciones comerciales entre China y Estados Unidos se rompieron hace un par de semanas, luego que la Casa Blanca acusó a Beijing de incumplir partes clave de un acuerdo sobre las conversaciones y decidió elevar la tasa arancelaria de 10 al 25% a varios productos chinos.
Polemizan por Huawei; Pompeo eleva tensión
Washington y Pekín intercambiaron duras palabras cuando el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, acusó al presidente ejecutivo de Huawei de mentir sobre los vínculos de su compañía con el gobierno comunista, el que a su vez dijo que la Casa Blanca debe poner fin a sus equivocaciones si quiere seguir negociando.
Estados Unidos colocó la semana pasada a Huawei Technologies en una lista negra comercial, prohibiendo en la práctica que empresas estadounidenses hagan negocios con el mayor fabricante de equipos de redes de telecomunicaciones del mundo y escalando una disputa entre las dos mayores economías del mundo.
Las acciones caían con fuerza ayer por el creciente temor a que el conflicto comercial entre China y Estados Unidos se convierta en una guerra fría tecnológica.
Pompeo dijo que el presidente ejecutivo de Huawei Technologies de China mintió sobre la inexistencia de vínculos de su compañía con el Gobierno de Pekín, y que creía que más compañías estadounidenses cortarían relaciones con el gigante tecnológico.
Tras rabieta, Trump necesita ayuda: Pelosi
La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, dijo que el mandatario Donald Trump hizo una rabieta durante la reunión con líderes demócratas del Congreso el miércoles, y que deseaba que su familia o personal realice una intervención por el bien del país.
Acusó a Trump de obstruir la justicia, lo que, dijo, es una falta que puede originar un juicio político.
«Nuevamente rezo por el presidente de Estados Unidos. Deseo que su familia, su gobierno o su personal hagan una intervención por el bien del país», expresó a periodistas.
La presidenta de la Cámara baja había acusado el miércoles a Trump de encubrimiento por las investigaciones relacionadas con la injerencia de Rusia en las elecciones de 2016, poco antes de que él la recibiera en la Casa Blanca.
Los comentarios irritaron a Trump y lo llevaron a salir de una reunión sobre infraestructura luego de solo tres minutos, posiblemente hundiendo las probabilidad de alcanzar una ley sobre el sector.
LEG