Filtraciones de mensajes telefónicos que intercambiaron el ex magistrado Sergio Moro y agentes públicos que participaron en la operación Lava Jato, en Brasil, fueron exhibidos por el portal The Intercept, lo que puso en tela de juicio la imparcialidad de la investigación que condujo a prisión al ex presidente Inacio Lula da Silva, por corrupción.
La operación Lava Jato (Lavado de Autos, en español) inició en 2014 por la Policía Federal Brasileña, y fue bautizada así en referencia a que el primer sitio allanado fue un servicio de lavado de automóviles en Brasilia, donde se realizaban maniobras irregulares.
Con casi 3 mil millones de dólares de por medio, es considerada por la Policía Federal la mayor investigación de corrupción de la historia de Brasil.
Las conversaciones privadas muestran que Moro, actual ministro de Justicia del presidente Jair Bolsonaro, sugirió al fiscal Deltan Dallagnol cambiar el orden de las fases de la operación Lava Jato, y dio consejos y pistas a los fiscales encargados del caso, lo que está prohibido por ley.
En otras conversaciones, los fiscales del grupo -liderado por Dallagnol- que investigaba la operación en Curitiba discutieron formas para impedir que Lula da Silva concediera una entrevista al diario Folha de Sao Paulo, porque beneficiaría a su Partido de los Trabajadores (PT) en las elecciones de octubre pasado.
El portal aseguró que estas revelaciones son “apenas el inicio de una gran investigación periodística en curso (…) sobre las pruebas de la investigación Lava Jato y sobre los actos de Moro cuando era juez, y sobre el fiscal Dallagnol”.
En declaraciones posteriores, Moro negó los hechos.
Él, como juez, condenó a Lula, pero habría mantenido durante dos años una colaboración prohibida con el procurador Dallagnol, encargado de la Operación.
La Constitución brasileña prohíbe que en el sistema acusatorio penal haya injerencia entre las figuras del acusador y del juez para garantizar el debido proceso, pero según las revelaciones, Moro orientó el trabajo del Ministerio Público y actuó como auxiliar de la acusación.
“No hay ninguna orientación ahí en los mensajes”, dijo Moro, y agregó: “lo que hay ahí es una invasión criminal a los celulares de procuradores, lo que para mí es un hecho bastante grave. Invasión y divulgación (de las conversaciones)”, informó la Agencia Brasil.
Es lo mismo que a Cristina: PT
La destitución de Dilma Rousseff de la presidencia brasileña y el encarcelamiento del ex mandatario Inacio Lula Da Silva buscaban cambiar gobiernos populares latinoamericanos por gobiernos de derecha, acusó Paulo Pimienta, líder del Partido de los Trabajadores (PT).
Y añadió: “No tengo dudas de que lo que le pasó a Lula es lo mismo que a Cristina (Fernández)”, dijo en referencia al proceso contra la ex presidenta argentina, acusada de encabezar una asociación ilícita que desvío fondos públicos, y por lo cual se le enjuicia.
El líder del partido de Lula habló a una radiodifusora brasileña sobre los presuntos arreglos ilegales entre autoridades judiciales brasileñas para perjudicar a Lula y evitar el regreso de la izquierda.
LEG