La presencia de migrantes indocumentados en el cruce fronterizo Rodolfo Robles, así como en los puntos no legales sobre el Río Suchiate ha disminuido en los últimos días, sin embargo, la cantidad de personas que cruzó a México de forma ilegal en el primer semestre del año aumentó.
A diferencia de los meses anteriores cuando las caravanas de migrantes ocupaban las calles y plazas públicas para descansar, hoy estos sitios lucen vacíos. Tanto en Ciudad Hidalgo como el parque central en Tecún Umán, Guatemala, no se observan a personas de otras naciones que se encuentren viajando.
Los habitantes de Chiapas y Guatemala comentan que por el puente fronterizo la cantidad de migrantes ha disminuido. Mientras en las orillas del Río Suchiate por donde las balsas hechas con grandes neumáticos cruzan a personas y mercancías por menos de 50 pesos, se detectan grupos de no más de cinco migrantes que pasan al lado mexicano en algunos momentos del día.
Ayer, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, declaró que de enero a la fecha han ingresado a México 144 mil migrantes ilegales.
El coordinador de la Casa del Migrante en Tecún Umán, Mario Morales, confirmó que el flujo migratorio aumentó, aunque no es visible como cuando arribaron caravanas con cientos de personas.
“Las caravanas del año pasado fueron abundantes, pero las de este año vinieron muy pocas pero con muchas personas y más que el año pasado, este año hemos tenido más migrantes”, declaró en entrevista con Notimex.
Comentó que en 2018 en ese lugar atendieron a siete mil 900 migrantes y en lo que va de 2019 son más de ocho mil migrantes los que han llegado al albergue.
Aseveró que a pesar de la información sobre una eventual llegada de la Guardia Nacional a la frontera para frenar el tránsito de migrantes indocumentados, las personas continúan arribando a México.
“La caravana del año pasado hizo bulla porque era una sola y vinieron bastantes pero las de este año han sido varias. El migrante sabiendo que los están deteniendo no para de venir”, expresó.
Mencionó que hasta la Casa del Migrante llegan grupos de entre 100 y 500 personas, sin embargo, los integrantes cruzan la frontera de forma individual, por lo que el arribo masivo es casi imperceptible.
En Chiapas, el Instituto Nacional de Migración, apoyado con policías militares y corporaciones de seguridad estatales, reforzaron los retenes en carreteras para detectar a personas indocumentadas.
“Nosotros sabemos que las intenciones de las autoridades por medio de estos operativos es frenar la migración, pero los migrantes siguen viniendo”, señaló Morales.
En la Casa del Migrante de Tecún Umán, 18 trabajadores y 60 voluntarios trabajan para brindar ayuda a los migrantes. Les ofrecen alojo por tres días, comida, aseo, atención médica, odontológica, psicológica y asesoría legal.
jhs