Tras su salida de la dirección general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Germán Martínez Cázares acudió este lunes a la reunión plenaria de la bancada de Morena en el Senado, previa al período extraordinario de sesiones que iniciará este martes, y aseguró que no existe rompimiento alguno con el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
“No vengo ni rendido, ni vendido, ni bandido, ni corrido”, afirmó, por lo que añadió que seguirá siendo un soldado del Presidente.
Asimismo, aclaró que luego de dar a conocer su carta de renuncia al IMSS, donde hizo una crítica al manejo de los recursos, no le hará el trabajo “a la desvergonzada” oposición que no ha sabido hacerle frente a López Obrador.
“No vengo a hacerle yo el trabajo a la oposición (en contra de López Obrador), por favor, sólo eso hacía falta”, declaró.
Anunció que seguirá trabajando desde el Senado para que se paguen en el IMSS las mismas cuotas que en el SAT, y que no se escatimen recursos al sistema de salud pública, porque “un movimiento igualador, un movimiento de justicia, un movimiento como el de López Obrador no debe regatearle a la salud pública dinero”.
Advirtió que estará atento para terminar con la corrupción del IMSS, que es “la de los patrones que lo estiman, no declaran y no pagan correctamente las cuotas”.
Asimismo, rechazó cualquier aspiración para la candidatura de Morena a la gubernatura de Michoacán, pues reconoció que existen otros personajes con más talento que él para ese cargo.
LEG