WASHINGTON.- Las ciudades de Estados Unidos que esperan una serie de redadas contra inmigrantes, con el objetivo de deportar a familias recién llegadas que están de forma ilegal en el país, dijeron el viernes que no cooperarán con las autoridades federales.
En una conferencia telefónica con periodistas a principios de esta semana, Mark Morgan, director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por su sigla en inglés), dijo a reporteros que la agencia apuntaría a familias que habían recibido una orden de expulsión de un tribunal de inmigración.
El diario Washington Post informó el viernes que las autoridades de inmigración planean lanzar el domingo una gran operación que involucre a hasta 2 mil familias que enfrentan órdenes de deportación en unas 10 ciudades de Estados Unidos como Houston, Chicago, Miami y Los Ángeles.
Un portavoz del ICE rehusó realizar comentarios, señalando que no ofrecerá detalles de las operaciones antes de su conclusión.
La alcaldesa de Chicago, Lori Lightfoot, dijo que puso fin al acceso del ICE a las bases de datos del Departamento de Policía de Chicago sobre inmigración como respuesta a la amenaza de redadas.
“También hablé personalmente con los líderes del ICE en Chicago y expresé mi firme objeción a tales redadas. Aún más, reiteré que el Departamento de Policía de Chicago no cooperará con, ni facilitará, las acciones del ICE”, dijo Lightfoot en un comunicado.
El Departamento de Policía de Los Ángeles dijo en una serie de mensajes en Twitter que no participaría ni ayudaría en las operaciones contra inmigrantes.
El alcalde de Houston, Sylvester Turner, destacó en un comunicado las “ricas contribuciones culturales” de los inmigrantes de la urbe y dijo que “la ciudad no intenta hacer el trabajo del ICE, ni intentará impedirlo”.
Morgan dijo previamente esta semana que ICE quería deportar a familias que habían ingresado recientemente de manera ilegal a Estados Unidos para desalentar la llegada de más centroamericanos.
La cantidad de inmigrantes detenidos que cruzan la frontera entre Estados Unidos y México aumentó en mayo al nivel más alto desde 2006.
La mayoría de los migrantes huyen de la violencia, la pobreza y la corrupción en Centroamérica, y buscan asilo, un proceso que puede tardar años. Muchas familias son liberadas en Estados Unidos durante la duración del proceso debido a los límites al tiempo que los niños pequeños pueden permanecer detenidos.
El Departamento de Seguridad Nacional no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
El gobernador de Texas, en tanto, comentó que el estado está desplegando mil efectivos de la Guardia Nacional en la frontera después de que dijo que más de 45 mil personas fueron detenidas cruzando ilegalmente en las últimas tres semanas.
fahl