El Servicio de Administración Tributaria (SAT) presentó durante el mes de junio 23 denuncias penales ante la Fiscalía General de la República (FGR) por facturación falsa y evasión fiscal durante el mes de junio, en las que incluso se implicó a funcionarios, anunció su titular Margarita Ríos Farjat, en conferencia de prensa realizada en Palacio Nacional.
“Entre las cuales hay algunas que el SAT identifica como desvío de recursos públicos. Las identificamos así, no está en nuestra arena así clasificarlas, pero nosotros las detectamos así.
“También presentamos una denuncia, la Administración General de Evaluación, por exfuncionarios, vamos a decirlo así, de entidades de Hacienda que se han vinculado con estos esquemas”.
Sobre esa última denuncia precisó que se tienen indicios de que crearon empresas que vendían facturas falsas, y ya están separados del SAT; la denuncia fue presentada en abril pasado.
Agregó que durante estos días se presentarán otras cinco denuncias por evasión.
La funcionaria explicó que de 2014 a junio de 2019, el SAT tiene identificadas 8 mil 204 evasores fiscales con operaciones simuladas, los cuales generaron hasta 8 millones 827 mil 390 facturas falsas; es decir, alrededor de mil facturas por casa evasor
Esas facturas significaron operaciones por mil 611 millones de pesos, y la evasión fiscal fue de 354 mil 512 millones de pesos.
De los evasores fiscales, 60 por ciento se ubican en nuevos estados de la república: 13 por ciento, en la Ciudad de México; 10 por ciento, en Jalisco; nueve por ciento, en Nuevo León; seis por ciento, en Veracruz; cinco por ciento, en Coahuila y el Estado de México; cuatro por ciento, en Guanajuato; y tres por ciento, en Guerrero y Puebla.
Ríos Farjat indicó que en las investigaciones del SAT son tanto para el evasor fiscal como hacia las empresas que venden estas facturas, las cuales suelen quedarse con un porcentaje del 10 por ciento de la evasión.
Hace llamado a ponerse al corriente
La funcionaria alertó a los usuario a que si tienen una factura falsa se autocorrijan de buena fe o de cualquier forma el SAT les caerá encima.
Las penas por este delito, con base en la nueva reforma al código fiscal, prevén como mínimo tres años de prisión y máximo seis.
“Antes de que lleguemos nosotros, bueno, en este momento el SAT requiere a todos los contribuyentes a que revisen su facturación lo antes posible.
“Estamos en disposición, como dice ahí, de ayudar a las personas, autocorregirse en caso de haber cometido el error de comprar una factura que quizá fue por inexperiencia, por curiosidad, por apuro económico, porque se les hizo fácil y demás”.
Indicó que para ello pueden acercarse al Bancen u oficinas desconcentradas del SAT.
JMSJ