CARACAS. El líder opositor venezolano, Juan Guaidó, dijo el martes que “nunca” es el momento para negociar con “una dictadura” o como califica al gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Guaidó dijo además que “no ha habido pronunciamiento oficial de que vamos a asistir a una nueva ronda” de diálogos con delegados del gobierno para buscar una salida a la crisis que atraviesa la nación OPEP.
El sábado tres fuentes familiarizadas con el tema dijeron a Reuters que el gobierno de Maduro y la oposición retomarían sus discusiones.
Hasta ahora han trascendido pocos detalles de un encuentro de mayo en Oslo entre delegados de Maduro y representantes de Guaidó, quien en enero invocó artículos de la Constitución para proclamarse presidente encargado por considerar ilegítimo al mandatario venezolano.
“Cuando se aproxime una solución a la crisis, a la tragedia de los venezolanos, sea cual sea el espacio (…) la mediación del reino de Noruega, la facilitación del Grupo Internacional de Contacto, la presión diplomática por parte del Grupo de Lima, ustedes serán los primeros en saber”, dijo Guaidó a periodistas en la antesala a una sesión de la Asamblea Nacional que preside.
Pero agregó que “nunca va a ser el momento para mediar (…) con unos secuestradores, violadores de derechos humanos y una dictadura. Aquí nadie se chupa el dedo, sabemos que es una dictadura asesina a lo cual nos enfrentamos”.
El fin de semana, un militar falleció en custodia de las autoridades que lo señalaban de conspirar contra el gobierno. La esposa del uniformado denunció que el capitán Rafael Acosta murió a causa de torturas, en un caso que Guaidó dijo que mostraba cómo actúa la dictadura de Maduro.
El sábado el ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, dijo en un comunicado que Maduro había solicitado a la Fiscalía General investigar el fallecimiento de Acosta, pero no dio detalles de cómo ocurrió la muerte.
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino, lamentó en otro comunicado el fallecimiento del oficial y que el pedido de Maduro al Ministerio Público ratificaba la policía estatal de “indefectible respeto a los derechos humanos”.
Según ONGs en Venezuela al menos 700 personas están detenidas, mas de un centenar de ellos uniformados, por razones políticas.
CS