Los niveles de ozono en Europa Central superaron el límite máximo permitido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), durante la ola de calor registrada la semana pasada, la cual provocó temperaturas inusualmente altas para el mes de junio.
Mediciones realizadas por el Servicio de Vigilancia de la Atmósfera de Copernicus revelaron que la semana pasada los niveles de ozono fueron superiores a 180 microgramos por metro cúbico en esa región europea, arriba de los límites permitidos entre 100 y 120 microgramos por metro cúbico.
Los datos del programa Copernicus, citados por el sitio de noticias europeo Euronews, mostraron niveles sobre los cuales las autoridades de cada país deben alertar a sus habitantes.
El ozono troposférico está formado por dióxido de nitrógeno (emitido por los combustibles fósiles) y compuestos orgánicos volátiles, que se liberan con mayor intensidad durante la ola de calor.
Algunas ciudades activaron planes de restricción del tráfico, incluso antes de la ola de calor que golpeó con altas temperaturas a países como Italia, España, Francia y Alemania, entre otros países.
El Servicio de Vigilancia de la Atmósfera de Copernicus, una iniciativa de la Comisión Europea, es el programa diseñado para dar información precisa, actual y de fácil acceso para mejorar la gestión del medio ambiente, comprender y mitigar los efectos del cambio climático y garantizar la seguridad ciudadana.
tfa