La Oficina del Promotor de Justicia de la Corte de Estado del Vaticano ordenó la apertura de dos tumbas en el Cementerio Teutónico como parte de la nueva investigación sobre el caso de Emanuela Orlandi, la joven que en 1983 despareció de forma misteriosa.
La apertura de las tumbas en el Cementerio Teutónico, que se encuentra en territorio del Vaticano, se realizará el 11 de julio próximo, anunció este martes el director de la oficina de prensa de la Santa Sede, Alessandro Gisotti, publicó la agencia Vatican News.
Emanuela Orlandi era hija de un secretario de la Prefectura de la casa pontificia, y la edad de 15 años desapareció en forma misteriosa, el 22 de junio de 1983, en Roma, Italia.
La apertura de las tumbas se llevará a cabo el 11 de julio próximo en presencia de los abogados de las partes, así como de los familiares de Emanuela y los familiares de las personas enterradas ahí, detalló el portavoz vaticano.
La decisión forma parte de uno de los expedientes abiertos tras la denuncia de la familia Orlandi que en los últimos meses denunció, entre otras cosas, el posible ocultamiento del cuerpo de Emanuela en el cementerio dentro del territorio del Estado del Vaticano.
En los trabajos para abrir las tumbas se contará con la asistencia técnica del experto Giovanni Arcudi, del Comandante de la Gendarmería del Vaticano, Domenico Giani, y del personal de la Gendarmería, agregó Gisotti.
Además, para la demolición y restauración de las losas y en la documentación de las operaciones participarán trabajadores de la Fabbrica di San Pietro y personal del Centro de Seguridad Operativa de la Gendarmería Vaticana, indicó.
El portavoz explicó que por motivos de carácter jurídico, la autoridad investigadora del Vaticano no tiene jurisdicción para llevar a cabo pesquisas sobre la desaparición ocurrida en Roma.
Las operaciones periciales del 11 de julio forman parte de la primera fase de una serie de exámenes ya programados que, después de la apertura de las tumbas y la recolección y catalogación de los restos, conducirán a los informes periciales para establecer su fecha y para la comparación del ADN, detalló Gisotti.
Pietro Orlandi, hermano de Emanuela, manifestó su agradecimiento al secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, “ya que seguramente de su parte hubo tanto valor para la apertura de esta investigación y en la decisión de abrir las tumbas”, reportó la agencia italiana de noticias Ansa.
“Y también al comandante Domenico Giani me gustaría agradecerle, entendí que existe la voluntad de aclarar” este caso, agregó.
La abogada de la familia Orlandi, Laura Sgrò, realizó la petición luego que recibió una carta anónima con la fotografía de la tumba en cuestión con el mensaje: “Mire donde indica el ángel”.
La frase hacía referencia a la estatua de un ángel que sostiene una hoja con la inscripción “Requiescat in pace” (“Descansa en paz”).
Según algunas reconstrucciones, durante años varias personas han depositado flores en esa misma tumba, porque se dice que Emanuela está enterrada allí.
Emanuela Orlandi, hija de un empleado del Vaticano, desapareció en Roma el 22 de junio de 1983 en lo que luego fue considerado un secuestro, cuyo motivo no resulta aún claro. El hecho tuvo una gran repercusión tanto en Italia como en el mundo.
jhs