Cerca de cinco mil personas se han medicado y han acudido a terapia para superar el llamado estrés postraumático que les dejó el sismo del 19 de septiembre de 2017.

La Secretaría de Salud de la Ciudad de México informó para un medio de comunicación, ha ofrecido consultas a cuatro mil 600 personas por padecimientos a raíz del siniestro, como estrés agudo, ansiedad generalizada, trastorno depresivo y estrés postraumático.

Daños psicológicos al presenciar cómo sus hogares se derrumbaran, dolor de perder a familiares y desgaste emocional tras vivir en campamentos o casas rentadas, son aspectos que afectan gravemente a las víctimas.

“No sólo impactó mi vivienda, sino también mi salud. Sufro cuadros de depresión y de ansiedad, tengo una angustia en el pecho que, por más que quiera, no desaparece, y un insomnio que se apodera de mí todas las noches”, dijo Olivia Domínguez, ciudadana afectada por el terremoto.

La dependencia añadió que también existen alteraciones en las personas cada vez que se activa la alarma sísmica, producida por el sistema de bocinas de la capital del país.

Sabías que:

Dos de cada 10 personas que presenciaron la catástrofe, actualmente experimentan el síndrome de estrés postraumático; condición que puede prevalecer hasta por 20 años.

De acuerdo con un especialista de la UNAM, algunos se sienten estresados y temerosos ante la posibilidad de que se repita un fenómeno similar, y eso depende de experiencias personales, incluso genéticas.

El daño varía, explicaron; si la gente no es tratada podría perder el deseo de trabajar y convivir, incluso recurre al uso de alcohol o drogas para superar alteraciones.

LEG