Por: Mario Galeana 24 Horas Puebla
El gobernador electo de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, negó que los ex secretarios de Hacienda José Antonio Meade Kuribreña y José Antonio González Anaya encabecen un equipo de trabajo para renegociar la deuda heredada por el Gobierno de Rafael Moreno Valle.
A través de Twitter, el morenista advirtió que no renegociará los contratos de Proyectos de Prestación de Servicios (PPS) y Asociaciones Público Privadas (APP) -mediante las cuales se financiaron obras públicas como el Museo Barroco o el Centro Integral de Servicios (CIS)-, sino que su gestión se dedicará a investigarlos y difundirlos a la ciudadanía.
La advertencia del próximo mandatario estatal sucedió después de que, en su columna de trascendidos, el periódico Milenio asegurara que Barbosa Huerta trataba de renegociar estos contratos, a través de un equipo de expertos en finanzas encabezado por los dos ex secretarios de Estado que trabajaron en el Gobierno de Enrique Peña Nieto.
“En relación al trascendido que hoy se publica en el periódico @Milenio nacional, debo decir que no renegociaré la deuda heredada del gobierno de Rafael Moreno Valle, por el contrario, la investigaré y la daré a conocer”, advirtió en un mensaje escrito la mañana de ayer.
“No tengo ninguna relación profesional con José Antonio Meade, ni con José Antonio González Anaya, a quienes respeto”, agregó.
Tras las elecciones del 2 de junio, el gobernador electo dijo que la deuda del estado podría ascender a más de 30 mil millones de pesos, si se consideraba el pago de fideicomisos, contratos de PPS y APPS, y otro tipo de obligaciones financieras.
El 10 de julio pasado, en una reunión con empresarios de la Cámara Nacional de la Industria de la Construcción (CMIC), Barbosa Huerta dijo señaló que sí buscaría renegociar los “contratos leoninos” que permitieron la construcción del CIS y el Museo Barroco, por los cuales -detalló- el Gobierno del estado debe pagar 300 millones y 350 millones de pesos anuales, respectivamente.
Sin considerar este tipo de convenios, la deuda reconocida del estado es de siete mil 140.2 millones de pesos, es decir, de mil 114.5 por cada poblano, de acuerdo con el más reciente informe sobre deuda estatal y municipal del Instituto Belisario Domínguez (IBD), del Senado de la República.
LEG