Miles de manifestantes en favor de la democracia desafiaron una prohibición policial y comenzaron a marchar por Hong Kong este domingo, un día después de unos violentos incidentes en los que la policía empleó gas lacrimógeno y balas de goma contra los participantes de la protesta.
La policía autorizó una protesta estática la tarde del domingo en un parque de Hong Kong, sin embargo, los manifestantes pronto salieron a las calles y comenzaron a marchar a pesar de la prohibición, aumentando la posibilidad de nuevos enfrentamientos.
Este es el octavo fin de semana consecutivo en que se han realizado protestas en la ciudad, destacó el sitio Channel News Asia.
La víspera las fuerzas antimotines de Hong Kong lanzaron gas lacrimógeno para dispersar a cientos de manifestantes que salieron a las calles para protestar por la reciente violencia registrada en una estación del tren subterráneo en el distrito de Yuen Long.
Los hongkoneses exigen la retirada de la polémica iniciativa de ley de extradición a China, así como para protestar por la violencia contra los manifestantes, en particular por los hechos del pasado domingo cuando aldeanos locales y miembros de la tríada armados con palos y barras de metal emboscaron a activistas y transeúntes, lo que dejó al menos 45 heridos.
PAL