POR: DANIELA WACHAUF, KARINA AGUILAR Y JORGE X. LÓPEZ
El gobernador Javier Corral y el canciller Marcelo Ebrard visitaron ayer a los chihuahuenses que resultaron heridos en el ataque perpetrado contra la comunidad hispana en El Paso, Texas, el sábado pasado en un centro comercial de esta localidad que dejó un saldo de 22 muertos.
Corral acudió al hospital University Medical Center en El Paso, Texas y se dirigió a una de las salas de espera donde estaban los familiares de Mario Alberto de Alba, quien recibió una bala en la espalda, cuando se volteó para proteger a su familia.
En tanto, el Gobierno de Coahuila, informó que es la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) la que tiene el primer contacto con la familia de Jorge Calvillo García, originario de Torreón y quien es una de las víctimas mortales del atentado.
El área de comunicación social del estado a través de José Gabriel Borrego, informó a este diario, que se había ofrecido el apoyo a la familia de la víctima; no obstante, manifestó desconocer en qué consistía tal ayuda y si la familia ya había dado información y aclaró que cualquier tipo de información sobre el tema se daría a conocer a través de un comunicado.
Por su parte, el presidente del PAN, Marko Cortés, pidió a la Cancillería que exija al Gobierno de EU que deje de tener un discurso que lastima a latinoamericanos, denigra y siembra odio.
“Es una posición muy débil, muy simple la de pedir que quien lo hizo venga a enfrentar la justicia en México. La pregunta es ¿quién lo provocó, cuáles fueron los dichos, cuál fue el mensaje de un país de quien gobierna que provoca estos enfrentamientos y esta forma de persecución?”, reclamó.
LEG