Tacones, vestidos, alhajas, zapatos bien lustrados, sacos y pantalones de casimir, fueron algunos de los ornamentos que portaron los invitados a celebrar el 82 aniversario del Salón de baile Los Ángeles, ubicado en la colonia Guerrero en la CDMX.

El gigante del baile lucha por mantenerse vigente, ya que la crisis que permea en el país, la violencia y las nuevas generaciones con poco gusto por el baile de salón lo están quebrando. Así festeja sus más de 82 décadas de vida el salón de baile por excelencia.

Lugar de historia

En una agradable tarde noche, se dieron cita amantes del baile para festejar el aniversario del más antiguo salón de baile de la Ciudad de México, a las afueras del recinto podía leerse en un cartel nombres como La Sonora Santanera, La sonora Dinamita, Héctor Infanzón y su Big Band, Son 14 desde Cuba, La Nueva Nostalgia, La Orquesta de Arturo Nuñez, además de un clásico de antaño La Danzonera Acerina y La orquesta de Perez Prado los reyes del mambo, quienes darían vida al evento hasta las 2:00 de la mañana.

Los muy arreglados asistentes, la mayoría de avanzada edad, esperaban en la entrada y platicaban entre ellos, fumaban un cigarro y reían. María Teresa de 64 años, quien esperaba con un gesto alegre recargada en la pared del recinto, contó a 24 HORAS que la primera vez que pisó la pista de ese salón fue en los 90, sin embargo lo que la llevaba ese día era el cumpleaños de su mamá, quien festejaría sus 83 años aún bailando.

Por su parte, Martha Ines de 83 años, comentó que la primera vez que asistió al Salón los Ángeles tenía tan sólo 15 años y bailó con sus papás y algunos amigos; con melancolía recordó a su esposo y los bailes que tenían en ese y otros salones de la ciudad.

“Mi edad ya no me deja acordarme tan bien de los nombres y las ubicaciones de todos los salones, porque a los jóvenes ya no les gusta bailar esto y han desaparecido, por eso hay que seguir viniendo a los que están, el baile es vida y siempre es bueno venir a sacudir las penas aunque sea unas dos veces al año”, comentó Martha con gran entusiasmo.

Las puertas abrieron y los asistentes se dieron paso apresurado a tomar sus lugares, las paredes vestían todas con reconocimientos, carteles de aniversarios pasados… muy pasados, fotografías de celebridades que han visitado el salón, y el tan distinguido altar de San Dámaso Pérez Prado, figura distinguida de la cultura popular latinoamericana, que hace del salón Los Ángeles un lugar con una carga cultural e histórica de la identidad popular de la Ciudad de México.

“El que no conoce Los Ángeles no conoce México”, es el lema que el lugar ha sostenido durante 82 años de historia, y para sumar más años de éxitos, Miguel Nieto, director del salón, anunció que se realizará una remodelación del lugar, dando paso así a una nueva era del salón y demostrando que, sus años de gloria no han terminado.

LEG