Aunque las bacterias que transmiten los perros y gatos cuando lamen los rostros de sus amos no son letales, sí producen inflamación crónica en el estómago, dolor abdominal, diarrea y fiebre, por lo que se debe procurar vivienda, alimentación, higiene y atención médica a estos animales de compañía para mantenerlos saludables.
Así lo expuso la gastroenteróloga Nayeli Xochiquetzal Ortiz Olvera, quien dijo que no todas los microorganismos que los animales transmiten a las personas causan enfermedad, pero algunos sí deben ser considerados de cuidado, como Campylobacter jejuni; Helicobacter heilmannii y pylori, además de Toxocara.
La especialista de la Facultad de Medicina (FM) de la UNAM refirió que casi 36 millones de adultos en México están infectados por H. pylori debido a la mala higiene o hábitos inadecuados de alimentación.
Mediante un comunicado de la Universidad Nacional Autónoma de México, expuso que esa bacteria es altamente prevalente en humanos y muy poco en animales y se asocia a procesos inflamatorios crónicos en el estómago, aunado a que desde 1994, la Organización Mundial de la Salud (OMS) la reconoció como un carcinógeno.
“Pero no trasciende en todas las personas, a menos que se cuente con antecedentes familiares de cáncer en estómago; úlceras en estómago, sangrados o molestias digestivas; en general son un foco rojo y se debe acudir con un especialista para el diagnóstico y tratamiento”, aclaró.
En el caso de H. heilmannii, mencionó que sólo los humanos son portadores, pero no les provoca daño, mientras que en animales sí origina afecciones estomacales como inflamación, vómito y diarrea, y la adquieren vía fecal-oral.
Respecto a la bacteria Campylobacter, la especialista indicó que se manifiesta en el humano con dolor abdominal, fiebre y diarrea que pueden complicarse con deshidratación, pues su periodo de incubación es de horas a días y puede tardar meses en manifestarse.
En cuanto a la toxocariasis, explicó que la larva que la produce viaja por el torrente sanguíneo y puede infectar casi cualquier tejido, siendo el hígado y los pulmones los de mayor frecuencia, y el paciente presenta fiebre e inflamación en el hígado sin causa aparente y su periodo de incubación es de cuatro días hasta meses.
En ese sentido, el jefe del Departamento de Medicina, Cirugía y Zootecnia para Pequeñas Especies, de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ), Jesús Marín Heredia, recomendó llevar a las mascotas con un especialista cuando tienen vómito, diarrea y dolor abdominal, además de evitar ser lamidos cuando están enfermas, pues se corre el riesgo de contagio.
“Esto no significa que si un perro lengüetea a su dueño le provocará cáncer o linfomas, pero tener un animal de compañía representa una responsabilidad importante, y para evitar problemas se les debe procurar una buena vivienda, alimentación, higiene y atención médica para mantenerlos saludables, con todas sus vacunas y desparasitaciones”, apuntó.
El especialista aclaró que la higiene también implica no dejar que las mascotas nos laman la boca o los ojos, a fin de evitar conjuntivitis o alguna otra infección severa, además, lavarse de manera correcta las manos después de acariciarlas.
jhs