Luego de que el jugador Joao Maleck provocara un accidente por viajar a alta velocidad y en estado de ebriedad e impactar a un vehículo en la parte trasera, causándole así la muerte a una pareja de recién casados, el futbolista rompió el silencio en un audiencia.
Tras mes y medio de que Joao entrara a prisión por dicho percance ocurrido en Zapopan, Jalisco, el pasado 23 de junio, el futbolista declaró por primera vez el día de ayer.
El joven ofreció su testimonio en la audiencia de revisión de medidas cautelares que se llevó a cabo en la sala de juicios orales de Puente Grande y aseguró que se hará cargo de los hijos de la pareja, quienes se encuentran huérfanos.
“Créanme que no quería que pasara lo que pasó. Yo voy a ver por esos niños. Yo sé lo que es no tener papá”, expresó.
Además, Maleck reiteró que lo único que desea es salir de prisión, “Es todo lo que tengo, y siento mucho lo que pasó. Si tuviera mil millones de pesos los daría todos”, señaló.
Momentos antes de que el juez emitiera su resolución, el implicado aseguró que “A cualquier persona le puede pasar, fue un accidente”.
Joao declaró que vivió en diferentes países, sin embargo, asegura que su domicilio siempre estará donde radiquen sus abuelos y su madre.
“Supe que hace días un policía del Estado también provocó lo mismo, y él ni siquiera piso la cárcel”, finalizó, sin embargo, el juez lo llamó a concentrarse en los hechos que se discutían en ese momento.
El ministerio le realizó una serie de preguntas a Joao, mismas que él contestó con tranquilidad, incluso su madre fue sometida a una serie de cuestionamientos en los que reveló que el automóvil que su hijo manejaba al momento del accidente se encuentra a nombre de ella; dijo contar con la factura y otros documentos que así lo comprueban.
DJOR