Linchamientos públicos no se deben repetir: Barbosa
Frente a los pobladores de Tepexco, el gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, advirtió que no será el instrumento de ninguna infamia por parte del Estado, pero tampoco permitirá “excesos” y actos ilegales, por lo cual no se deberán repetir más linchamientos en la entidad.
“El uso de la justicia por mano propia es una reacción, pero no es legal y lo deben ustedes de atender y lo deben de ustedes aceptar. No puede ser así, si fuera así, no existiera un régimen institucional y no hubiera órdenes de Gobierno”, planteó a cuatro días del linchamiento de siete personas acusadas de secuestro, al explicar que, ni siquiera en la ley se ha establecido la pena de muerte como un castigo.
Barbosa Huerta dijo entender que la decisión de quitarles la vida a siete personas señaladas de haber secuestrado a un habitante de Cohuecan es la reacción de un pueblo ante un hecho delictivo, por el abandono institucional y falta de respuesta institucional, así como a la debilidad del Estado de Derecho y la inseguridad que aqueja a la entidad, lo cual ha afectado la convivencia social.
Por lo anterior, se comprometió a que en su Gobierno habrá una actuación a tiempo ante los hechos delictivos, además de fortalecer al gobierno municipal y contar con su presencia para que haya un régimen de seguridad pública, eficiente, eficaz, que cuide y proteja.
“Tenemos que generar condiciones para que el respeto a las instituciones, a la ley, a la convivencia, sea la prioridad del desarrollo y del progreso”, agregó.
El mandatario llegó a la demarcación acompañado de su gabinete, encabezado por el secretario de Gobierno, Fernando Manzanilla Prieto y el de Seguridad Pública, Idelfonso Amezaga Ramírez.
Pide respeto a autoridades en Cohuecan
Por otra parte, en Cohuecan pidió a sus habitantes a respetar y confiar en las autoridades y en las instituciones.
“Quiero que vivamos en Puebla sin miedo y sin odio, que reaccionemos de manera natural, que pensemos que a lo único que debemos de temer es a la ley, pero el temor a la ley debe ser un temor institucional, no el temor de que se aplique, esperando que la ley sea justa y equitativa”, expresó.