Un estudio efectuado por diversas instituciones y la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar), determinaron que el sargazo no afecta a la salud, ya que no presenta lixiviados agresivos -líquidos que han entrado en contacto con los desechos de los rellenos sanitarios u otros lugares donde haya desperdicios- o dañinos para el medio ambiente terrestre.
En aguas costeras, los resultados de nutrientes no indicaron concentraciones elevadas que señalen un proceso de contaminación, por lo que se consideran aguas adecuadas, para uso recreativo y contacto primario.
Asimismo, en aguas oceánicas los resultados preliminares en las comunidades planctónicas, reflejan la condición de baja productividad características del mar Caribe; los parámetros físico-químicos, se encuentran dentro de los rangos característicos en la época de verano para el Caribe mexicano.
La dirección general de Oceanografía, Hidrografía y Meteorología de la Semar junto con personal de investigadores y técnicos, así como personal del Instituto de Investigaciones Oceanológicas de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), mantienen una fase de prueba del instrumento oceanográfico (boyas de deriva).
El empleo de las boyas de deriva ayuda para ubicar e identificar la trayectoria de las agregaciones de sargazo, que tienen un diseño compacto y ligero que permiten liberarlo de forma muy simple.
Estas boyas cuentan con telemetría inteligente, lo que permite enviar su posición geográfica vía satélite gracias a sus componentes resistentes y fotoceldas, las cuales mantienen alimentado este instrumento con autonomía sustentable durante varios meses.
LEG