Lejos de oponerse a la Ley Federal del Trabajo, el combate de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) es contra los artículos “que no tienen fundamento legal y que no están en la reforma constitucional, ni en los Tratados de Libre Comercio o en los convenios de la OIT”.
En entrevista con Notimex, el abogado de la CTM, Ángel Celorio Bueno, reveló que hasta el momento “tenemos poco más de 400 amparos” combatiendo los puntos sin sustento o contradictorios de la Ley Federal del Trabajo reformada.
“No es que nosotros busquemos eternizar los privilegios que dicen que tenemos, simplemente nos oponemos a lo que no tiene sustento jurídico”, sostuvo.
Es por ello que manifestó su confianza en el Poder Judicial, “que en algunos casos nos ha requerido la información, otros no nos han dado la suspensión ni parcial ni definitiva, y en otros casos sí nos han dado el amparo”.
Desde luego, aclaró que la CTM está preparada para apoyarse en un recurso de revisión, “y en un momento dado llegar hasta la Suprema Corte”.
Recordó que desde que se discutió en el Senado la iniciativa que dio lugar a la reforma laboral se tienen 19 observaciones que a la fecha siguen defendiendo, como la que señala que para “elegir directiva el voto debe ser personal, libre, secreto y directo”.
“Nosotros lo venimos practicando desde hace tiempo, pero lo de directo no tiene fundamento en la ley. En ningún lado aparece y se inventó en la reforma”, aseveró Celorio Bueno.
Explicó que hay sindicatos que tienen trabajadores en toda la República, lo que a veces implica días de traslado a una asamblea, y si se recurriera al voto directo “la planta productiva ¿se va a parar?”.
Agregó que también se está combatiendo “la intromisión descarada de la autoridad en el régimen interno de los sindicatos. Los estatutos deben tener esto y esto y esto. Claro que hay una normatividad legal y la respetamos, pero no al grado de que se inmiscuyan a ese grado las autoridades”.
Otro punto que se defiende y que se ha difundido mucho es la cuota sindical, a lo que aclaró que el Convenio 98 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) dice que el trabajador puede pertenecer a cualquier sindicato.
Desde luego, aclara que ello debe ser bajo la única condición de que se respeten sus estatutos. “Y en los estatutos se habla de los descuentos, entonces ya se está previendo que desobedezca el trabajador su propio estatuto”, apuntó.
Por último, destacó la omisión que se hace contra el tripartismo, el cual es atropellado verdaderamente.
“Simplemente en el Centro de Conciliación y Registro Laboral hay una Junta de Gobierno en donde no se toma en cuenta ni la representación patronal ni la representación obrera”, y es en donde se marcan directrices como la del Seguro Social o el Infonavit, subrayó.
Agregó que a ello se suma el protocolo emitido por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) recientemente para que se “legitimen” los Contratos Colectivos de Trabajo existentes.
Esto, dijo, tiene un relativo sustento porque el Artículo 11 transitorio de la reforma habla de que la Secretaría del Trabajo, en lo que se establecen los tribunales laborales y los Centros de Conciliación, podrá ir viendo los Contratos Colectivos”.
“Pero no para atrás, no retroactivamente. La propia Constitución prohíbe que una ley se aplique retroactivamente en perjuicio de persona alguna”, por ello para esta causa también se están promoviendo amparos porque “no tiene sustento jurídico”.
MGL