Los representantes de México en el futbol europeo en general han tenido un resultado muy alentador, y es imposible no ilusionarse pensando en un gran torneo para cada uno de ellos, lo cual traerá consigo para nuestro balompié.

Lo de Chucky Lozano fue realmente extraordinario, debutar en la liga italiana con el Nápoles y hacer gol contra la poderosa escuadra de Juventus, pero además, ser parte fundamental en un regreso que pudo ser histórico habla por sí solo de un debut magnífico.

Ya habíamos platicado aquí que no sería fácil para Lozano, pero al menos la presentación le abrió muchas puertas, y de entrada se ganó el respeto de esa tan especial fanaticada napolitana, quienes en 45 minutos se dieron cuenta de la calidad y capacidad del mexicano, que además es goleador.

El famoso Chucky volvió a repetir el anotar en su debut, una vieja costumbre en su corta carrera que promete un futuro realmente bueno.

Y mientras Lozano llama la atención, lo de Raúl Jiménez es también para festejar, marcando goles en todos lados, en cualquier competencia, de todos sabores y colores.

En el Wolverhampton es un ídolo, la afición le canta, y responde con goles, tiene a los Lobos en competencia europea, si bien es cierto que este plantel no ha ganado en la Liga, Raúl no deja de anotar, llámese como se llame el rival.

Pero hay otro debut que alegra, por su calidad y por su juventud: me refiero a Edson Álvarez, quien en el primer juego que arrancó de titular, lo hizo bien y encontró el gol en la mismísima Champions.

Eso le valió ser ya titular en la Eredivisie y ser parte de una goleada del Ajax, que ya sabe que no se equivoco en la contratación del ex americanista.

Este alentador inició de torneo, nos lleva a reafirmar la convicción de que en México hay calidad, hay mucho talento por encontrar y exportar.

Por ejemplo esta el caso de JJ Macias, el centro delantero del León, producto de las básicas de Guadalajara. Tiene todo para también triunfar fuera de nuestras fronteras. Por cierto me gustaría que no lo exporten sino hasta el próximo verano, no hay porque apresurarse y pensar nada más en el dinero.

Tenemos ya la historia de Diego Lainez,que nos confirmó que seis meses más en América lo hubieran ayudado mucho. Ahora le está costando, lo está sufriendo, tarde o temprano va a triunfar, porque tiene condiciones para hacerlo, pero se apresuraron, no escucharon voces con experiencia y ahora vive una maduración futbolística y de vida de una forma que no tenía necesidad.

Con todo esto, no podrían darse cuenta nuestros directivos que hay que apoyar más al joven jugador mexicano, que es un gran negocio y ayudará al desarrollo de nuestro deporte.

Para ello, nuevamente la petición de bajar el número de extranjeros en nuestra Liga, no mucho, pero si disminuir ese reglamento. La Liga es un negocio y lo entendemos, pero bajarlo a siete deja obligadamente en la cancha a cuatro nacionales.

Como dicen, que tanto es tantito.