GINEBRA.- El Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas acusó hoy a Estados Unidos, Francia y Reino Unido de ser cómplices de Arabia Saudita y otros países árabes en los crímenes de cometidos en Yemen, incluidos ataques aéreos, torturas, asesinatos y detenciones arbitrarias.
El Grupo de Expertos Eminentes Internacionales y Regionales sobre Yemen, creado por el Consejo, publicó este martes un informe sobre sus investigaciones sobre una serie de posibles crímenes cometidos en los últimos cinco años en el país árabe.
El Grupo descubrió que los gobiernos de Yemen, Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Arabia Saudita, así como rebeldes del Movimiento al Houthi, que controla amplias zonas de Yemen, y sus comités populares afiliados han sido responsables de violaciones a los derechos humanos y el derecho internacional.
De acuerdo con el informe “terceros estados” directa o indirectamente tienen influencia en las partes beligerantes de Yemen y “pueden ser responsables de proporcionar ayuda o asistencia para la comisión de violaciones del derecho internacional”.
El documento cita, en particular, a Estados Unidos, país al que acusó de proporciona apoyo logístico e inteligencia a la coalición árabe que lucha contra los rebeldes, además de venderle miles de millones de dólares en armamento, así como a Irán por su apoyo los chiítas Houthi.
“La legalidad de las transferencias de armas por parte de Francia, Reino Unido, Estados Unidos y otros Estados sigue siendo cuestionable”, destacó el documento, tras instarlos a abstenerse de proporcionar armas y recordarles su obligación de garantizar el respeto al derecho internacional humanitario.
La República de Yemen ha permanecido en guerra desde septiembre de 2014, cuando las tropas rebeldes del Movimiento al Houthi tomaron el control de la sede del gobierno, el aeropuerto, las escuelas y varios edificios públicos de Saná, obligando al presidente Abd Rabbah Mansur Hadi a huir a la portuaria ciudad de Aden.
Desde el 26 de marzo de 2015, una coalición de nueve países árabes, liderada por Arabia Saudita, impulsa una ofensiva militar contra la milicia chiíta, en busca de restablecer al presidente Hadi en el poder y expulsar a los rebeldes, que son respaldados por fuerzas iraníes.
“Cinco años después del conflicto, las violaciones contra los civiles yemeníes continúan sin cesar, con total desprecio por la difícil situación del pueblo y la falta de acción internacional para responsabilizar a las partes en el conflicto”, indicó Kamel Jendoubi, presidente del Grupo en un comunicado.
A pesar de la falta de cooperación de la Coalición y el gobierno de Yemen, el Grupo realizó más de 600 entrevistas con víctimas y testigos, examinar documentos documentales y material de código abierto, y llevó a cabo investigaciones sobre presuntas violaciones a los derechos humanos en Yemen.
Los expertos encontraron motivos razonables para creer que la conducción de las hostilidades por las partes en conflicto, incluidos los ataques aéreos y los bombardeos, siguió teniendo un impacto extremo en civiles y muchos de estos ataques pueden constituir violaciones graves al derecho internacional humanitario.
Además, descubrieron violaciones relacionadas con la conducción de las hostilidades de las partes en el conflicto armado, que son responsables de la privación arbitraria del derecho a la vida, la detención arbitraria, las desapariciones forzadas, violencia sexual, tortura y malos tratos.
Así como, el reclutamiento de niños, violaciones de las libertades fundamentales y de los derechos económicos, sociales y culturales, que violan el los derechos humanos y del derecho internacional humanitario, según el comunicado del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, con sede en Ginebra.
“La privación inhumana de la población yemení de sus derechos a la medicina, el agua y la comida debería detenerse de inmediato. La supervivencia misma de los 24 millones necesitados debería ser la primera prioridad”, indicó Jendoubi.
gac