El próximo 9 de septiembre iniciará la ampliación del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, con un presupuesto de 430.9 millones de pesos, y las obras estarán a cargo de la empresa Sacyr Construcción México.
De acuerdo con el fallo de la licitación LO-009KDN002-E60-2019, la obra concluirá el 26 de diciembre.
La ampliación de la Terminal 2 funcionará como una tercera mini Terminal, donde se utilizarán los terrenos e infraestructura que por más 50 años sirvieron, en exclusiva, para aterrizajes y despegues de la flota de aeronaves presidenciales.
De acuerdo con el proyecto ejecutivo de la obra, realizado por la empresa Rod Consulting, se construirán al menos siete posiciones de abordaje, que se edificarían en el que fue el Hangar Presidencial y sus terrenos adyacentes.
Dicho proyecto explica que en el actual aeropuerto Benito Juárez, operan 50 líneas aéreas y se requiere del diseño arquitectónico, mecánica de suelos, estudios ambientales y demás para la “construcción de nuevas salas de espera y abordaje de pasajeros, transformando siete posiciones remotas, en siete posiciones de contacto, con la construcción de un pasillo, salas de abordaje y servicios complementarios”.
Abundan que “debido a la saturación y alta demanda, las condiciones operativas del embarque y desembarque de pasajeros se ha visto rebasada, comprometiendo los tiempos de espera de los pasajeros”, por tanto, “se determina apremiante la necesidad de mejorar el ámbito operacional en materia de movilidad de pasajeros, ofreciendo un servicio eficiente y con un alto nivel de calidad”.
Además de la ampliación del actual aeropuerto en la Ciudad de México, el plan del gobierno es construir otra terminal aérea en la base militar de Santa Lucía, Estado de México y rehabilitar el aeropuerto de Toluca, entre otros proyectos.
LEG