Después de la Segunda Guerra Mundial, en 1946, se creó la Organización Mundial de Periodistas, en cuyo IV Congreso celebrado en 1958, en Bucarest, Rumania, se estableció el 8 de septiembre como el Día Internacional del Periodista.
En esta fecha, el checoslovaco Julis Fucik, quien se dedicaba a esta actividad y recibiera el Premio Internacional de la Paz de manera póstuma, fue asesinado por la policía nazi, la Gestapo, en 1943.
Cuando estuvo en la prisión de Pankrác, en Praga, Fucik escribió el reportaje “Al pie de la horca”, publicado en 1945 y traducido a 80 idiomas. Este texto tuvo un enorme impacto por narrar las condiciones de crueldad que se vivían en aquella cárcel.
En el apunte final del manuscrito, el periodista pronuncia: “…Seguramente ya no tendré ocasión de escribir. He aquí, pues, mi último testimonio. Un trozo de historia, del que soy, sin duda, el último testigo vivo…”.
¿Cuántas personas dedicadas a este trabajo son perseguidas o amenazadas por investigar, opinar e informar? ¿Cuántas desaparecen o son ejecutadas sin saber que quizá han escrito su última columna?
De acuerdo con la Clasificación Mundial de Libertad de Prensa de Reporteros Sin Fronteras, que mide el grado de libertad del que gozan los informadores, México ocupa el lugar 144 de 180 países. Por su parte, del año 2000 a agosto de 2019, Article 19 ha registrado 131 asesinatos de periodistas en México relacionados con su profesión.
El acceso a la información complementa las libertades de expresión e información, y fortalece la labor periodística, en particular, la enfocada a la investigación, porque permite consultar fuentes gubernamentales, contrastar y corroborar datos, seguir la pista del dinero público, indagar y profundizar en temáticas sociales, vigilar el actuar de las autoridades, exigir su rendición de cuentas y visibilizar en la agenda pública asuntos de interés general.
Para coadyuvar en su acción, en el Instituto de Transparencia capitalino impulsamos talleres de capacitación dirigidos a quienes se dedican a esta actividad, con el fin de facilitarles las bases necesarias para que el derecho de acceso a la información les sea de utilidad en su quehacer.
Ejercer la profesión del periodismo con libertad e información es esencial para las democracias, porque contribuye a elevar el debate público al sustentarlo en información de calidad.
Citando a Simone de Beauvoir: “Que nada nos limite. Que nada nos defina. Que nada nos sujete. Que la libertad sea nuestra propia sustancia”.
Con este pretexto, agradezco al periódico 24Horas por este espacio semanal que me permite compartir reflexiones, sin límites, sobre nuestros derechos y temas de interés para la Ciudad y para México.
*Comisionada Ciudadana del Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública, Protección de Datos Personales y Rendición de Cuentas de la Ciudad de México (INFO).
Twitter: @navysanmartin