PARÍS – Un tapiz ornamentado tejido a principios del 1800 y rescatado de la catedral de Notre-Dame de París después de un enorme incendio en abril, será exhibido públicamente por tercera vez en las últimas décadas.
Donado a la catedral en 1841 por el rey Luis Felipe I de Francia, la alfombra de 25 metros de largo con sus coloridas cornucopias y vívidas coronas de flores se utilizó históricamente en ocasiones especiales, incluida la visita del Papa Juan Pablo II en 1980.
Cuando los bomberos sacaron la alfombra empapada de agua del interior de la catedral días después del incendio del 15 de abril, pesaba dos toneladas, el doble de su peso habitual.
Los restauradores usaron un túnel de viento para ayudar a secar el tapiz antes de congelarlo para matar cualquier hongo y parásitos que pudiera comerse el tejido, dijo Herve Lemoine, director del Mobilier National de Francia, que supervisa la colección de muebles y obras de arte valiosas del país.
“Sufrió daños por agua durante la operación para contener el fuego. Como pueden imaginar, con el calor del fuego, y también porque en ese momento estábamos entrando en verano (boreal), había riesgo de que hongos y parásitos pudieran dañar el tejido”, dijo Moine.
El tapiz sólo ha estado en exhibición pública dos veces en los últimos 30 años. Estará abierto al público en el Mobilier National durante las Jornadas Europeas del Patrimonio de París, el 21 y 22 de septiembre.
mvb