NACIONES UNIDAS. “Es una falacia decir que la Amazonia es Patrimonio de la Humanidad”, afirmó el mandatario brasileño Jair Bolsonaro, en su discurso en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), mientras que en su país varios parlamentarios calificaron el discurso como “vergonzoso”.
“La soberanía brasileña es lo más sagrado. Es una falacia decir que el Amazonas es un patrimonio de la humanidad y un error, como atestiguan los científicos, decir que el territorio es el pulmón del mundo”, dijo al tiempo que afuera de la sede de de la ONU en Nueva York se registraron algunas protestas.
“Nuestra Amazonia es más grande que toda Europa occidental. Brasil es uno de los países que más protege el medio ambiente y cabe destacar que la quema también es causada por los indios como parte de su cultura y supervivencia”, puntualizó.
El Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales informó la víspera que entre enero y agosto pasados, la extensión de las hectáreas devastadas por los incendios fue 90 por ciento superior al mismo periodo de 2018.
Además, la Cancillería brasileña divulgó una nota reforzando el “compromiso con los acuerdos internacionales en el área ambiental en el marco del Acuerdo de París”.
Bolsonaro también agradeció a su homólogo estadunidense, Donald Trump, por su apoyo al país en la reunión del G-20 cuando defendió la soberanía brasileña sobre el Amazonas.
En tanto, el líder del Partido de los Trabajadores (PT), Paulo Pimenta, escribió en Twitter: “¡Que vergüenza! Bolsonaro es cínico al mostrarse como un defensor de los pueblos indígenas e hipócrita al acusar a personas como el jefe Raoni, quien tiene décadas de activismo ambiental en defensa de la Amazonia y, por lo tanto, es odiado por los ruralistas amigos del presidente de la milicia”.
Para el diputado federal, Jandira Feghali (PT), “Bolsonaro repudia tanto el tema ideológico que simplemente pronunció un discurso puramente ideológico, superficial, lleno de mentiras y noticias falsas en la ONU. Llevó su ignorancia al escenario mundial. ¡Que vergüenza! Una vergüenza histórica”.
De acuerdo con reportes de prensa, Bolsonaro llegó a Nueva York y fue recibido con protestas de brasileños y estadunidenses frente al hotel donde se hospeda, así como consignas como ‘Amazonia sí, Bolsonaro, no’.