Sin hacer caso a los argumentos de la oposición, Morena y sus aliados impusieron su mayoría y lograron sin cambio alguno, la aprobación en lo general de la Ley General de Educación, la Ley Reglamentaria sobre Mejora Continua de la Educación y la Ley General del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros.
Al cierre de esta edición, se perfilaba la aprobación de las reservas presentadas por las minorías, que pedían acotar el poder otorgado a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Entre pancartas de la oposición con las leyendas “Educación sin mafia” y “AMLO y Morena traicionan a tus hijos por votos”, y gritos de la bancada mayoritaria como “Ya cayó, ya cayó, la reforma ya cayó”, las bancadas mayoritarias no permitieron hacer un solo cambio a las minutas enviadas por la Cámara de Diputados y que fueron negociadas con así integrantes del magisterio.
Así, con la aprobación de la Ley General de Educación, se desaparece el Instituto Nacional de Infraestructura Física (INIFED), que era el encargado de administrar los recursos y lineamientos para la infraestructura y mantenimiento de los planteles.
Ahora el recurso será otorgado de manera directa a los maestros y padres de familia, mediante el Comité Escolar de Administración Participativa que dejará a discreción su uso.
Durante el debate, el ex panista y ahora integrante de Morena, Germán Martínez, recordó a la senadora del PAN, Josefina Vázquez Mota, que durante su gestión como secretaria de Educación manifestó ante la entonces lideresa del magisterio, Elba Esther Gordillo, que no se podía construir una reforma educativa al margen del sindicato.
De inmediato vino la respuesta de la panista, quien confirmó sus dichos, pero acotó que el acompañamiento de los maestros debe ser “sólo con calidad, no con mediocridad, no con prebendas o privilegios (…) lo que hoy se pretende es la mayor traición, y estamos a unas cuantas horas de lo que pueden ser las horas más oscuras para nuestra patria”, respondió Josefina Vázquez Mota.
En el mismo sentido, el también panista, Damián Zepeda, dijo que la reforma educativa debe ir acompañada de los maestros, “pero no hincados ante el poder de los sindicatos. Esta reforma es un regalo para los sindicatos”, advirtió.
Los grandes ausentes en el debate, fueron los priistas, quienes se limitaron a presentar reservas a las tres leyes aprobadas para lograr mayor presupuesto al sector educativo, acotar la intervención de los sindicatos y protestar por la desaparición del INIFED; sin embargo ninguno de los ex colaboradores y correligionarios del ex presidente Enrique Peña Nieto, salió en defensa de una de las denominadas reformas estructurales de su sexenio.
Luego de que la senadora del PRI Beatriz Paredes advirtiera que Morena cuenta con la mayoría de votos para aprobar las reformas y que quedaría en su conciencia, el presidente de la Comisión de Educación, Rubén Rocha, señaló que no buscan aplicar la mayoría, pero ante las “falsedades” de la oposición, la bancada de Morena cumpliría con sus compromisos de campaña, de abrogar la reforma educativa de Peña Nieto y reiteró que no hay automatización de plazas a los egresados de las normales, sólo una prioridad.
LEG