Justo como se esperaba: un duelo de poder a poder entre Eagles y Packers. Filadelfia ganó gracias a una intercepción en los últimos segundos en su propia zona de anotación, y con eso perdió el invicto el equipo de Aaron Rodgers.
Green Bay arrancó el partido como un equipo bien aceitado a la ofensiva, con un Aaron Rodgers en forma, y encontrando a sus receptores. En el primer cuarto, el pasador de Empacadores armó una gran ofensiva, y Aaron Jones la concretó con un acarreo de tres yardas hasta las diagonales.
Después de que Filadelfia comenzó titubeante, la dupla de Carson Wentz y Zach Ertz se conjuntaron para conseguir primeros y diez en varias ocasiones.
Los primeros puntos de Eagles llegaron por medio de un envío de Wentz para Dallas Goedert de tres yardas, y el duelo se apretó ligeramente. Posteriormente Jordan Howard acarreó el ovoide una yarda para que Filadelfia tomara la ventaja.
Cuando parecía que las Águilas se iban al descanso con más ventaja, apareció la magia de Rodgers. Con menos de un minuto en el reloj, al quarterback le bastaron dos pases para poner los cartones 21-20.
El tercer cuarto arrancó como acabó el primer tiempo, con ofensivas sostenidas, y con Wentz-Ertz a todo vapor. Ambos prepararon el terreno para que Howard atrapara un pase de 20 yardas de su quarterback, quien ya llevaba tres pases de tocuhdown.
Por el otro lado, a Green Bay pareciera que se le acabó la magia, y Rodgers fue detenido dos series consecutivas.
El último cuarto se convirtió en un partido de una sola serie: el que tuviera el balón al expirar el reloj, sería el ganador.
En los últimos segundos se dio un momento dramático, y es que Avonte Maddox, defensivo de Filadelfia, salió conmocionado por un golpe de un compañero. Se vio claramente que iba inconsciente en la camilla rumbo a los vestidores.
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