Un joven argentino se removió un tatuaje con un rallador de queso para poder entrar a la Policía de Seguridad Aeroportuaria; sin embargo, dicha acción le trajo consecuencias a la salud.
La historia nos remite a 2017, cuando un sujeto en Mendoza, Argentina, se hizo un pequeño tatuaje en el antebrazo derecho.
Tiempo después, al quererse integrar a las fuerzas del orden, le dijeron que no lo aceptarían con tinta en la piel, así que decidió quitársela.
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EL MUCHACHO DEL TATUAJE Y EL RALLADOR, UN AMIGO DE LA CASA❤️ Amigo de hace muchos años!
Primero intentó con piedra pómez, pero esto no le funcionó. Después probó con el rallador y el argentino dice:
“Me dolió y sangró muchísimo. Tenía que vendármelo constantemente y colocarle desinfectante y antiséptico. A la semana fui a un hospital y me dieron la vacuna antitetánica”.
Al final, el gaucho no confirmó si fue aceptado o no en la Policía, lo que sí es seguro es que no aprobó este procedimiento.
“No se lo recomiendo a nadie”, cerró.
Con información de Noticias Caracol.
jhs