Al menos 55% de la población rural nacional vive en pobreza y, de ellos, 16.4% se ubica en la extrema pobreza, reconoció el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, durante su comparecencia ante el Pleno de la Cámara de Diputados como parte de la glosa del primer informe del gobierno federal.
La razón, abundó el funcionario, ha sido el modelo de apertura económica y comercial globales que se ofrecieron a los sectores avanzados del sector agroalimentario para incrementar su competitividad en los mercados internacionales, pero que no alcanzó a los pequeños productores.
Esto, dijo Villalobos Arámbula, acrecentó la desigualdad y la exclusión en el campo, por lo que la actual administración busca aumentar la disponibilidad de alimentos básicos y reducir la dependencia de las importaciones como medida para sacar de la pobreza a más de la mitad de los productores.
Además, se les acompañará en la necesaria vinculación con la innovación y tecnologías, “lo que permitirá también incidir en sacar de la pobreza y la marginación a las familias del sector rural”.
Señaló que ante una realidad de desigualdad se deberán aplicar políticas diferenciadas y realizar los ajustes necesarios para la operación efectiva de los programas prioritarios, los cuales contribuirán a resarcir la deuda social en los territorios rurales.
El titular de la SADER remarcó que la seguridad alimentaria con soberanía depende de una política de Estado para lograr la autosuficiencia en al menos cinco productos básicos: maíz, frijol, trigo panificable, arroz y leche, reduciendo las importaciones y, en consecuencia, la dependencia externa.
CS