Los estatutos del sindicato de Pemex indican que aunque Carlos Romero Deschamps presentó su renuncia irrevocable, ésta todavía debe ser aprobada por el Consejo Nacional de Vigilancia en Asamblea Nacional.
Para convocar a ese proceso se tienen 30 días, por lo que, hasta la fecha de la realización éste, será legal la renuncia de Romero.
Como interino a cargo del gremio petrolero quedó el diputado federal priista, Manuel Limón, según los estatutos, sólo podrá estar en el cargo hasta diciembre, después se tendría que elegir al nuevo dirigente.
El capítulo tercero de los estatutos del sindicato está dedicado a las renuncias de los funcionarios del Comité Ejecutivo Nacional, donde se expresa que éstas deberán presentarse ante el Consejo General de Vigilancia, misma que “aprobará o desechará el dictamen en un término no mayor a 30 días, contados a partir de la rechaza que reciban el dictamen de referencia”.
En caso de que el Consejo rechace la dimisión de Romero Deschamps, “éste deberá continuar en funciones y en caso de rebeldía quedará sujeto a la consiguiente responsabilidad sindical”.
jhs