A una semana de los hechos registrados en Culiacán, Sinaloa, es necesario que la población conozca a detalle lo ocurrido con el operativo fallido para saber quiénes o quién tomó la decisión, a fin de deslindar responsabilidades, castigar a los implicados y evitar con ello que vuelva a ocurrir, aseguró el presidente del PAN, Marko Cortés.
El dirigente panista añadió que lo sucedido se debe a una mala determinación de las autoridades responsables de la seguridad del país, característica constante de este gobierno.
Pero sin duda, dijo, el problema de origen se derivó de una decisión gubernamental equivocada dentro de un operativo, en donde el objetivo principal era aprehender a uno o varios cabecillas del crimen organizado que opera en Sinaloa.
Con esto, consideró, el Gobierno demostró una serie de deficiencias e incongruencias en la ejecución de su estrategia de seguridad.
Cómo ejemplo de ello, el líder del PAN, enumeró la insuficiente información de un sistema de inteligencia eficaz; una incorrecta planeación; una inadecuada ejecución del operativo, y una insuficiente previsión de las posibles consecuencias que pudieran ocurrir.
“De esta manera, queda evidenciado el problema de fondo del gobierno de López Obrador, que es la enorme debilidad del sistema de seguridad del país”, expuso Cortés.
Puntualizó que se debe señalar que las acciones de seguridad de la actual administración no han dado mejores resultados que gobiernos anteriores, y por el contrario, los índices de criminalidad son cada vez más graves y de alto riesgo para la población.
“El primer año del gobierno de López Obrador será el peor de la historia de México en materia de seguridad, pues de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, durante los nueve meses de 2019 los delitos de alto impacto registraron aumentos significativos que van desde 1.3 hasta 35%”, dijo.
El dirigente del PAN destacó que fue una irresponsabilidad desde el principio haber expuesto de esa manera a la sociedad culiacanense con un operativo mal planeado, pero también lo es, en un segundo momento a todo México con el pésimo precedente que sienta, en la coyuntura innecesaria de decidir entre dos males: la menor pérdida de vidas en el momento del operativo, o el posterior y muy probable desenlace de más muertes en el futuro.
Es por ello reiteró su confianza en las instituciones como el Ejército, pero hizo un llamado al Presidente de la República para que cambie su estrategia contra la inseguridad, porque las decisiones que ha tomado hasta este momento solo han fortalecido a los grupos criminales, “sino que ya le tomaron la medida al gobierno agarrando como escudo a los civiles”.
MGL