Con perros amaestrados fue revisado el aeropuerto Internacional de Cancún, para disipar la amenaza de bomba que se hizo mediante un reporte.
Fueron casi 3 horas de revisión, para que a las 16:44 se cancelara la alerta de bomba que se reportó para un vuelo en la terminal aérea.
La Policía Federal puso en funcionamiento los protocolos de seguridad por una amenaza de explosivos en un vuelo, en el que, tras la inspección entre cosas y personas, no encontraron artefacto explosivo alguno.
Por la amenaza de bomba, en redes sociales se menciona que al menos dos vuelos registraron atraso de más de dos horas, pero finalmente los viajeros y personal del aeropuerto se reportan fuera de peligro.
MGL