Los 14 días de paro cívico en Bolivia han provocado pérdidas por 167 millones de dólares, informó el Ministerio de Economía, tras anunciar que a partir de este martes suspende el pago de ayuda que otorga a los adultos mayores de 60 años en el país.
El ministro de Economía, Luis Arce, advirtió que el paro tendrá un efecto negativo mayor en el Producto Interno Bruto (PIB) nacional ante la amenaza de toma de instituciones públicas y cierre de fronteras, que han hecho grupos cívicos y la oposición política.
“Hemos estimado, en el Ministerio de Economía (…) estimaciones que se han hecho, que estos 14 días, el país ha perdido 167 millones de dólares”, lamentó Arce en conferencia de prensa que reporto la agencia de noticias ABI.
Detalló que por cada día de paro se registran pérdidas por 12 millones de dólares y se advierte una mayor afectación al PIB con la toma de instituciones públicas, como del Servicio de Impuestos Nacionales o de la Aduana Nacional.
Lamentó que con las pérdidas económicas resultarán afectados los servicios públicos, el transporte, y el comercio entre otros sectores, ante las medidas que el Comité Cívico, empezó protestando contra los resultados de las elecciones generales y ahora demanda la renuncia del presidente boliviano Evo Morales.
“Estas medidas que ha tomado el Comité Cívico tendrán consecuencias para los municipios, para las gobernaciones y para las universidades públicas que reciben recursos de la coparticipación”, señaló.
Mencionó que estas pérdidas afectarán a varios programas que benefician a miles de personas en Bolivia, como son los adultos mayores y los niños.
“Vamos a tener que suspender el pago a los adultos mayores que están el programa Renta Dignidad “con el perjuicio para nuestros abuelitos y nuestras abuelitas, que no van a poder cobrar quizá el único sustento periódico que reciben”, anunció Arce.
El ministro indicó que otro programa social que resultará afectado será el pago del Bono Juancito Pinto, que beneficia a los escolares y que dejó de pagarse en el departamento de Santa Cruz, donde las protestas son más contundentes.
RYHP