Carlos Slim, presidente vitalicio del Grupo Carso, indicó que participará en las limitaciones para la construcción del Tren Maya, manifestó en entrevista con medios de comunicación luego de la comida de empresas constructoras con el Presidente Andrés Manuel López Obrador en Palacio Nacional.
A pregunta expresa de que si intervendrá expresó: “Sí, vamos a ver (los términos), todavía no salen”.
Sobre la reunión, en la que estuvieron presentes también integrantes de Grupo Salinas, de las empresas de los Vazquez Raña, BlackRock así como la Oficina de Servicios y Proyectos de la ONU, Rogelio Jiménez Pons, titular de Fonatur y encargado de la obra, indicó que se les explicó en qué consiste el proyecto y la idea es que su participación se dé en los mejores estándares.
“En consecuencia, lo que se quiere de la iniciativa privada es que hay que evitar los abusos que con la Ley de Obra Pública, que tengamos un proceso lo más claro.
“El apoyo es de un pacto de caballeros que todos contribuyeron con sus mejores prácticas para que el proyecto se lleve a cabo en las mejores condiciones económicas”.
Indicó que los empresarios manifestaron preocupación por los problemas sociales que puedan darse, pero se les dio garantías de que prácticamente está resuelto.
“Localmente ya no hay problema, hay broncas en los derechos de vía por ejemplo de los ejidos de Quintana Roo, tienen deuda de hace tiempo y tienen toda la razón si les quedan a deber desde hace 20 años, y no han pagado completo… Arriba del 90 por ciento ya nos apoya”.
Sobre el punto, Slim resaltó que no debe haber conflictos sociales sino “ayudar a todas las personas que viven en el sureste”.
Jiménez Pons también indicó que se ajustará el esquema de porcentaje de partición presupuestal del gobierno e iniciativa privada.
Agregó que posteriormente se convocará a empresas para señalización y material rodante.
CS