Con dos toques de silencio, la entrega de la bandera mexicana a su familia y la expresión que suele usar para su propio movimiento, el presidente Andrés Manuel López Obrador homenajeó al activista obrero Valentín Campa, al darle un lugar en la Rotonda de las Personas Ilustres ubicada en el Panteón Dolores.
“El mejor homenaje que podemos rendir es comprometernos a no fallarle al pueblo, a no robar, a no mentir, a no traicionar al pueblo de México. Así será, así vamos a actuar en homenaje a quienes han luchado en otros tiempos por la justicia, por la libertad, por la democracia y por la defensa de nuestra soberanía”, expresó.
Resaltó que Campa encarnaba dos virtudes: la honestidad y la humildad, lo cual lo marcó de otros dirigentes obreros que actuaban con ínfulas y se enriquecieron en los cargos.
En el mismo sentido llevó sus palabras la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.
“Fue un talentoso defensor de la autoorganización de los trabajadores, libre de intromisión, tanto de patrones como del Gobierno, fue un adalid del rechazo a la perversión que representa el charrismo”, comentó y destacó que él nunca dejó sus ideales por dinero o cargos en el Gobierno.
“Si él viviera, estaría peleando y pidiendo castigo a crímenes de Estado contra el pueblo de México, por mencionar algunos: Ayotzinapa, Aguas Blancas, Acteal, la Guerra Sucia, incluyendo el todavía impune Luis Echeverría Álvarez”, expresó su nieto Sántiago Álvarez Campa.