Foto: Archivo El dictamen que reforma la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, fue remitida a la Cámara de Diputados para sus efectos constitucionales  

El Senado de la República aprobó por unanimidad, prohibir el castigo corporal, como método correctivo o disciplinario a niñas, niños o adolescentes

En el documento se señala que el castigo corporal y otras formas humillantes de castigo son todavía usadas como medios de disciplina. Refiere que en México, seis de cada diez niñas, niños y adolescentes, de entre 1 y 14 años, han experimentado algún método de disciplina violenta.

 

La presidenta de la Comisión de los Derechos de la Niñez y de la Adolescencia, Josefina Vázquez Mota, informó que de acuerdo con la UNICEF la incidencia de niñas que son asesinadas en sus casas es cuatro veces mayor que el de varones y, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), entre 2012 y 2017, fueron asesinados casi 2 mil 600 menores de 15 años, 42% de ellos a manos de algún familiar en sus hogares o por maltrato.

La presidenta de la Comisión de Estudios Legislativos, Segunda, Ana Lilia Rivera Rivera, expresó que el objetivo de esta reforma es contribuir al cumplimiento de las obligaciones constitucionales y convencionales del Estado mexicano sobre los derechos de la niñez.

 

Dijo que el castigo corporal es un fenómeno generalizado en América Latina y tiene un impacto directo en los ámbitos físico, médico, psicológico y emocional de los menores de 18 años. Afecta a 176 millones de niñas, niños y adolescentes, quienes a su vez lo replican en su cotidianidad, se agrega.

La senadora refirió que en nuestro país únicamente la Ciudad de México, Zacatecas y Chiapas prohíben específicamente el castigo corporal en sus leyes, mientras que Guanajuato y Chiapas lo prohíben en sus códigos penales. En tanto, 14 entidades contemplan excusas para lesionar a los descendientes.

Ante este escenario, los legisladores comentaron que tienen la obligación de asegurar una protección especial a este sector de la población contra el uso del castigo corporal en todos los entornos, familia, escuela, instituciones públicas y privadas, centros de detención y en comunidades.

Por el PT, el senador Miguel Ángel Lucero Olivas dijo que los castigos corporales para niñas, niños y adolescentes son una herramienta que lamentablemente aún es usada en pleno siglo XXI y “aún cuando sean correctivas o disciplinarias, ponen en riesgo su desarrollo integral”, declaró.

 

El dictamen que reforma la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, fue remitida a la Cámara de Diputados para sus efectos constitucionales.

 

La senadora del PAN, José Fina Vázquez Mota informó que según datos de la Unicef, quienes sufren este tipo de maltratos tiene 2.4 menos de posibilidad de gozar un desarrollo adecuado en la infancia y por el contrario aumenta el riesgo de presentar el comportamientos agresivos.

 

Indicó que el castigo corporal es un fenómeno generalizado en América Latina y tienen un impacto directo en los ámbitos físico, médico, psicológico y emocional en los menores de 18 años. El cual afecta a 176 millones de niñas, niños y adolescentes, quienes a su vez lo replican en su cotidianidad.

 

La reforma fue turnada a la Cámara de Diputados para realizar los cambios constitucionales.

 

DAMG