Las autoridades de Ryrkaypiy, una aldea ubicada en el extremo norte de Rusia, extremaron medidas para proteger a la población ante la presencia de unos 56 osos polares, cuyo descenso fue atribuido al cambio climático.
Las actividades públicas fueron canceladas y las escuelas cerradas a fin de proteger a los residentes, señaló personal del programa de patrulla de osos de WWF-Rusia (siglas en inglés del Fondo Mundial para la Naturaleza), que consideró la evacuación permanente debido al recién y frecuente avistamiento de estos animales.
Conservacionistas señalan al cambio climático como la principal causa de que los osos se vean obligados a buscar comida en la aldea, de unos 700 residentes, en lugar del mar debido al débil hielo costero.
La manada, de acuerdo con reportes de la prensa local, está integrada por machos y hembras de diferentes edades, así como cachorros; todos delgados. Normalmente viven en el cabo Schmidt, que a solo 2.2 kilómetros de Ryrkaypiy, está experimentando un clima inusualmente cálido.
El clima es cálido para diciembre, por lo que el hielo que cubre el mar de Chukotka (del Océano Glacial Ártico) no se solidificó cerca de la costa. “Si el hielo se pusiera sólido, los osos irían mar adentro a cazar focas”, señaló WFF.
FV