El abogado de Julian Assange, Aitor Martínez, confirmó hoy que el fundador de WikiLeaks declarará para evitar su extradición a Estados Unidos, el próximo 20 de diciembre en Westminster. Dará su testimonio como víctima de espionaje en la embajada de Ecuador en Londres.
En entrevista con el medio Sputnik, el abogado de Assange informó que paralelo al proceso de extradición a EUA, se abrió una investigación penal en la Audiencia Nacional de España (ANE) contra la empresa a cargo de la seguridad en la embajada de Ecuador en Londres, US Global.
De acuerdo con una investigación publicada en el medio La República, el activista de internet fue espiado durante los últimos siete años mientras sostenía reuniones con periodistas, abogados, políticos o cualquier otro visitante en la embajada de Ecuador, a donde llego para refugiarse en 2012.
US Global había obtenido videos, audios y fotografías que enviaba al servicio de inteligencia de Estados Unidos. Incluso, las investigaciones demuestran que los celulares utilizados dentro de la embajada fueron interceptados para las operaciones de espionaje.
El caso abrió una puerta para que Assange evite su traslado a EUA, ante lo que Aitor Martínez enfatizó en que el próximo viernes la denuncia ante la justicia española será definitiva para la audiencia de extradición, programada para febrero de 2020.
La defensa de Assange buscará demostrar el caso de espionaje por parte de la empresa española en complicidad con el servicio de inteligencia de los Estados Unidos de tal forma que Reino Unido niegue la extradición del ciberactivista australiano a un país que no respetó las garantías mínimas del acusado.
Martínez confirmó la realización de una primera audiencia la próxima semana, en la que se presentarán pruebas sin la presencia de Assange; después el acusado dará su declaratoria ante el caso de espionaje y la decisión final se tomará el 25 de febrero, cuando se determine si Assange será trasladado a EUA.
Assange se encuentra encarcelado en la prisión de máxima seguridad de Belmarsh, Londres con 18 cargos en su contra, uno de ellos, de hasta 175 años de cárcel por violar la ley de espionaje.
En su defensa, Rusia ha externado su preocupación por el estado de salud del ciberactivista y ha denunciado que se trata de un linchamiento contra un periodista que ha buscado ejercer el periodismo de denuncia e investigación.
EFVE