BEIRUT.- Decenas de manifestantes lanzaron hoy piedras y petardos contra la policía libanesa que trató de impedir que estos llegaran a la Plaza de los Mártires, lugar donde se mantienen acampados desde hace dos meses los opositores al régimen.

 

La policía respondió con gases lacrimógenos como en semanas anteriores ha ocurrido en Beirut, pese a que ya renunció el 29 de octubre el primer ministro libanés, Saad Hariri, y el jefe del Hezbolá, poderoso movimiento chiita, ha pedido tranquilidad a sus simpatizantes.

 

Con las protestas de este sábado se reavivan los enfrentamientos violentos registrados desde el pasado 17 de octubre ante la imposición de gravámenes y contra la corrupción del gobierno.

 

Estas movilizaciones se desarrollan desde que se anunció la medida de introducir un impuesto a las llamadas telefónicas hechas mediante WhatsApp, diversas aplicaciones y otras políticas tomadas por el dimitido primer ministro.

 

El plan era imponer un gravamen diario de 0.20 dólares por efectuar las llamadas de Voip, voz por protocolo de internet, sistema que también utilizan otras redes sociales como Facebook, Messenger y FaceTime.

 

Los jóvenes intentaron acercarse a la Plaza, al volver de un barrio céntrico de Beirut, considerado un bastión del Hezbolá y del partido Amal, principales expresiones políticas y militares de la comunidad chií del Líbano.

 

La plaza ha sido rodeada por casas de campaña donde los opositores al régimen acostumbran organizar debates políticos desde octubre, donde ya no solo protestan por los impuestos pues ahora también demandan la corrupción de la clase política.

 

Ayer, el líder de Hezbolá Hasan Nasralá, dijo que Washington intenta utilizar las manifestaciones para lograr sus objetivos y especialmente presionar a su grupo por un posible “descontento popular” en su contra.

 

Consideró también que Estados Unidos propone al pueblo libanés renunciar a sus capacidades defensivas y de extracción petrolera a cambio de una posible ayuda.

 

El país experimenta un empeoramiento de la crisis económica y financiera que ha afectado la confianza en su sistema bancario. Las potencias extranjeras han dicho que brindarán apoyo solo si hay un gobierno capaz de implementar reformas.

gac