Brindan apoyo con música a saxofonista atacada con ácido
Como una exigencia hacia las autoridades para la detención del ex diputado priista Juan Antonio Vera Carrizal, por su presunta responsabilidad como autor intelectual del ataque con ácido contra la saxofonista María Elena Ríos Ortiz, a la oficina de la representación del estado de Oaxaca en la Ciudad de México acudieron intérpretes de la Facultad de Música (FAM) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el colectivo Mujeres que se Organizan por Otras Mujeres.
En septiembre pasado, la joven de 26 años resultó con quemaduras en 80% de la superficie corporal, luego de que un sujeto le aventó ácido. Actualmente se encuentra internada en el Centro Nacional de Investigación y Atención de Quemados (Ceniaq) del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR).
En Oaxaca también
Un grupo de personas se manifestó afuera de la Fiscalía Especializada en Delitos por Razón de Género de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca para exigir justicia por Ríos Ortiz.
A este lugar llegaron personas con pancartas que pegaron en las paredes de este edificio.
“Juan Vera Carrizal ¡Agresor!”, “En México acosan, matan y violan pero aquí no pasa nada”, “Ni un asesinato más”, “Justicia para María Elena”, eran algunos mensajes.
Posteriormente con saxofón, clarinetes y sus voces algunas chicas interpretaron la “Canción Mixteca”, antes de que se leyera un pronunciamiento en torno al caso.
“Nos reunimos aquí para exigir justicia para María Elena Ortiz, nuestra compañera y amiga atacada vilmente en el municipio Huajuapan de León, región mixteca de Oaxaca, el 11 de septiembre pasado”, leyó una manifestante.
Continuó que desde entonces a la fecha las instituciones responsables de impartir justicia “no han hecho su trabajo, es por ello que levantamos la voz y decimos: basta de simulaciones, exigimos justicia verdadera para Elena y a todas las mujeres violentadas en la región mixteca de Oaxaca”.
Demandaron una auditoría independiente a la vicefiscalía de la región mixteca por su “omisión, posible protección de delincuentes y revictimización de mujeres agredidas”.
LEG